Vamos a valorar la tendencia del S&P 500 y del Euro Stoxx 50 en gráficos mensuales y semanales, pues nos ofrecen menos ruido y mayor fiabilidad que los análisis de velas diarias o intradía.
El S&P 500, como vemos en el gráfico mensual, tras perder la primera media de 20 meses (línea verde) probablemente intentará frenar la caída en las proximidades de los 3.750/3.800. Por este nivel pasa la directriz que une los máximos del índice y algo parecido también vemos en el indicador RSI, pues su directriz de mínimos crecientes pasa por los niveles actuales.
¿Por qué es importante el nivel actual?
En el gráfico semanal observamos que la corrección de Fibonacci del 38,2% pasa por el nivel de 3.800 puntos, con el RSI en 30, alcanzando una sobreventa no vista desde los mínimos de marzo 2020.
Respetar las directrices del gráfico mensual es importante, pues la pérdida de los 3.800 muy probablemente llevaría al índice a los 3.500/3.600, que es el siguiente soporte y el nivel por donde pasa la media de 200 semanas (línea naranja).
Mejor aspecto técnico nos ofrece el Euro Stoxx 50.
En el grafico mensual vemos que el precio se ha detenido nuevamente en su directriz alcista. Además, la media de 50 meses (línea azul) está actuando de soporte.
El gráfico semanal es todavía más concreto, pues la media de 200 semanas (línea naranja) ha actuado de soporte tanto en marzo como en mayo. El único 'pero' es el volumen, que no ha sido lo suficientemente alto. Sin embargo, mientras el índice europeo esté cotizando por encima de los 3.400, no estaría dentro de una tendencia bajista, sino de una corrección de la tendencia alcista principal.
La ruptura y posterior cotización por encima de la resistencia de los 3.800 nos daría una probabilidad muy alta de dar por terminada la corrección y poder hablar de continuidad del movimiento alcista iniciado en marzo del 2020.