Los títulos de la entidad cántabra amanecían con tímidas caídas que, poco a poco se han ido acelerando hasta dejarse a media sesión más de un 3%. Lo que le lleva a cotizar más cerca de soportes que de resistencias.
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Independientemente de lo que haga este martes la cotización de la entidad cántabra (y más después de un rally del 10% desde finales de marzo) nos gustaría hacer hincapié en el mensaje de que al mercado hay que ir mirando los gráficos en espacios temporales más amplios, como nos gusta hacer con el gráfico semanal. Así pues, antes de la apertura decíamos que el gráfico no era malo por cuanto el precio cotizaba en la zona intermedia del lateral, podía poner rumbo durante las próximas semanas hacia la zona de resistencia que presenta en los 6,05-61,0 euros, la parte superior del lateral.
Tras las importantes caídas de media sesión lo cierto es que el escenario de corto plazo cambia, pero no así el de medio plazo. No en la medida en que este no perfore el soporte que presenta en los mínimos anuales, los 5,10 euros. La experiencia nos dice que la salida por parte del precio de un amplio movimiento lateral acostumbra a tener violentas reacciones por el lado por el que el este termina rompiendo. Pero mientras de dicho lateral la operativa se ciñe a intentarlo por el lado alcista en los niveles de precio más cercanos a la base del movimiento, los 5,10-5,20 euros y a vender en la parte alta del mismo, los 6,05-6,10 euros. Por lo tanto, en teoría cualquier aproximación a la zona de mínimos anuales se debería interpretar como una nueva oportunidad para intentarlo por el lado largo o alcista siempre que no se perforen los mínimos anuales (5,10 euros).
En términos de muy corto plazo el título presenta un importante soporte en el hueco alcista de la sesión del 5 de abril en los 5,20-5,25 euros y por debajo los mínimos anuales, en los 5,10 euros.