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Independientemente de lo que pueda suceder en el más corto plazo, lo que debemos tener claro es que existe una zona de soporte que debería respetarse en todo momento.

Ni tenemos figura de vuelta ni señal de agotamiento alguna que nos invite a pensar que la corrección haya tocado a su fin en Banco Sabadell. Pero al menos tenemos muy 'clarito' dónde está el soporte a respetar en todo momento: los mínimos anuales en los 1,0160 euros. Este nivel es importante por cuanto se corresponde con el tercer punto de apoyo de una potencial directriz alcista, la que une los mínimos crecientes de 2012, 2016 y de este mes de octubre. La perforación de dicho soporte sería una más que preocupante señal de debilidad en la entidad financiera. Y por arriba, por el lado de las resistencias, tenemos el último máximo decreciente en los 1,35 euros. O mejor dicho, para tener una primera señal de fortaleza real, más allá de los típicos rebotes (o fases de reacción) le exigiremos al título que salte por encima del último máximo decreciente.

Gráfico semanal de Sabadell

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