Las caídas de las últimas semanas de Mapfre encajan dentro de los parámetros normales

Cuanto antes aprendamos a que a toda gran subida, más tarde o más temprano le sigue su fase de ajuste (fase de reacción) mejor que mejor. Dicho esto es cierto que desde los máximos del año el título acumula una caída del 12% pero todavía sube un 90% desde principios de 2016. Lo que quiere decir que la corrección, por el momento, es mínima en comparación con lo subido en términos de medio y de largo plazo. En el muy corto plazo se puede decir que el título no presenta soporte alguno hasta la zona de los 2,69 euros, el hueco alcista de la sesión del 25 de enero. Hueco que se rellenó parcialmente pero no se cerró (o lo que es lo mismo anuló). En cualquier caso todavía no tenemos figura de vuelta ni nada que nos diga que la fase correctiva de corto plazo haya llegado a su fin, pero lo que debemos saber es que estas caídas, aun cuando puedan profundizarse más todavía, no enturbian lo más mínimo la que es la tendencia alcista de medio y de largo plazo.