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Los títulos de Endesa han pasado en sólo dos semanas de acariciar los máximos históricos a buscar el importante soporte de los 17,90-18 euros.

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Si bien es cierto que la rentabilidad de los bonos venía corrigiendo (en precio) desde principios de septiembre el resultado de las elecciones estadounidenses, con la inesperada victoria de Donald Trump, no ha hecho sino acelerar el movimiento de caída de los bonos estadounidenses y europeos (provocando subidas en las rentabilidades de los mismos). El mercado está dando por hecho un fuerte incremento del gasto público una vez Donald Trump llegue a la Casa Blanca, con las presiones inflacionistas que ello traería consigo. De ahí que, por ejemplo, la rentabilidad del Bund en este momento cotice en los 0,345%, la del diez años español en el 1,55% y la estadounidense en el 2,24%. Ante un escenario de mayor inflación las compañías que reparten jugosos dividendos pierden atractivo y de ahí el castigo que este sector está experimentando en los últimos tiempos.

Técnicamente lo que tenemos delante es una importante caída en los títulos de Endesa tras acariciar recientemente los máximos históricos que marcó en 2015. Desde ahí se nos ha venido abajo con contundencia y por el momento le tenemos intentando agarrarse a la importante zona de soporte que presenta en los 17,90-18 euros, antes resistencia. En principio y en la medida en que no perfore los mínimos de la semana pasada (17,80 euros) cabe apostar por un rebote hacia la zona de los 18,50 euros e incluso el hueco bajista de la sesión del miércoles en el entorno de los 18,95 euros. Ahora bien, la perforación de los mínimos de la semana pasada dejarían la puerta abierta a un escenario de continuidad bajista con objetivo de caída en el soporte de los 15,60 euros (hueco alcista de la sesión 27 de junio).

Gráfico semanal - Endesa

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