Si no fuera por el ruido que tenemos acerca de la difícil situación por la que está pasando el país transalpino por su pulso con la Comisión Europea (CE), diríamos que es momento de comprar.
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El índice transalpino es de entre las grandes bolsas del Viejo Continente, el que más ha caída desde los máximos de abril (-12%). El motivo no es otro que la incertidumbre acerca de las cuentas del país ante un mayor endeudamiento y menor crecimiento de su economía, por no hablar del pulso a la Comisión Europea. Con todo, técnicamente le tenemos en plena zona de soporte: en el nivel de ajuste/retroceso del 61,8% de toda la subida desde los mínimos de diciembre, coincidiendo además con los máximos de noviembre y de diciembre (antes resistencia).
De lo que se deduce que si hubiera un nivel de precios desde el que 'lanzarse a la piscina' es justo ahora, en plena zona de soporte y con un 'stop loss', en cierres, por debajo del soporte de los 19.500 puntos. Por otro lado, hemos de estar muy atentos al resultado de la reunión del BCE este mediodía y a las medidas que adopte para intentar reactivar la economía de la zona euro.
