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Todavía es pronto para cantar victoria, pues figura de vuelta no tenemos y todo encaja a día de hoy dentro de lo que es un simple rebote. Pero nunca se sabe, por algún lado habrá que empezar.
Ni mucho menos queremos dar a entender que tengamos un suelo de mercado definitivo. Todavía es pronto para saberlo, pues figura de vuelta como tal no tenemos y dudo mucho que se construya en el corto plazo. Aunque como nos gusta recordar: siempre sabemos cómo empiezan las cosas pero no cómo terminan. Y lo cierto es que a día de hoy tenemos una corrección, muy violenta eso sí, de entre el 50-61,8% de retroceso del último gran impulso alcista. El que llevó al principal índice del mundo desde los 1.810 hasta los 2.940 puntos. Luego, hasta aquí, se puede decir que la corrección encaja dentro de los parámetros normales.
Por otro lado, mucho se suele hablar de la MM200 diaria (o media móvil simple de 200 sesiones) como indicador para saber sin un determinado subyacente se encuentra en tendencia alcista o bajista de fondo, cuando la realidad es que en la gran mayoría de las ocasiones esta genera numerosas señales falsas tanto al alza como a la baja, más ruido que otra cosa. Sin embargo, desde mi experiencia la MM200 semanal es mucho más fiable en términos de medio y de largo plazo. Y lo cierto es que si cogemos el gráfico semanal de largo plazo, desde 2001, esta estaría actuando con precisión milimétrica como resistencia/soporte según sea el momento del mercado. Y desde mediados de 2011 la MM200 semanal está actuando, al tick, como soporte.
De lo que se deduce que cualquier mínimo posibilidad de que Wall Street haya construido un suelo de mercado pasa porque se respete en todo momento los mínimos de 2018, esto es en los 2.346 puntos. Ahora bien, en el corto plazo parece que el rebote puede tener continuidad hasta aproximadamente la zona de resistencia, antes soporte, de los 2.600-2.625 puntos (¿pull back?).
