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Nos falta romper con claridad, con holgura, y a poder ser en velas semanales. Lo bueno, que al menos el precio continúa construyendo mínimos y máximos crecientes, que no es poco.
A lo largo de las últimas semanas hemos hablado una y otra vez de la importancia de la resistencia de los 9.260 puntos: los máximos de noviembre, diciembre, finales de enero y finales de febrero. Pero para mayor contundencia y fiabilidad del movimiento le pedíamos que lo hiciera con claridad, por ello hablamos de los 9.300 puntos, y a poder ser en velas semanales. Cosa que por el momento no ha sucedido.
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Con todo, las sensaciones siguen siendo buenas. Pero la 'sobrecompra' diaria, la de muy corto plazo, arroja lecturas extremas. Lo que deja la puerta abierta a que a pesar de superarse resistencias (por la mínima) podamos corregir/drenar los excesos de las últimas sesiones/semanas. Además, como se puede apreciar la MM200 diaria confluye prácticamente en este momento con la zona de control de los 9.260 puntos.
Luego, resumiendo, el gráfico sigue siendo bueno e invita al optimismo. Sobre todo, porque como analista técnico el precio siempre manda. Este es el que siempre tiene la última palabra. Pero eso no quieta para pedirle algo más de contundencia (de filtro) a la superación de resistencias. Por lo que, agradeceríamos que el principal banco de nuestro país confirmara también el movimiento saltando por encima de la resistencia de los 4,4 euros. Ya que por encima de esta resistencia tendremos (a priori) otra clara figura de vuelta. Y si Santander rompe al alza, lo más probable es que el Ibex también lo haga. O mejor dicho, no vemos al Ibex rompiendo si la entidad cántabra no lo hace.
