Desde los mínimos anuales, que también lo son históricos (8,10 CHF), el título acumula una revalorización del 35%.
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Dentro de que la impecable tendencia bajista de Aryzta sigue intacta, cabe decir que algo parece estar cambiando en el título. Algo parece estar moviéndose, por fin. Por un lado, tenemos las importantes subidas de este lunes que en algunos momentos de la sesión llegaron a ser superiores al 30% (al cierre se revalorizó un 17,77%). El volumen fue de los más altos de su historia y aunque lejos de los máximos del día (12,69 CHF) el precio conseguía cerrar por encima del último máximo creciente. Por no hablar, de los mínimos y máximos crecientes que está construyendo el título desde los mínimos históricos que marcó en agosto en los 8,10 CHF.
Figura de vuelta no tenemos, no nos engañemos. Pero qué duda cabe que el título parece querer hacer algo distinto, superando la directriz bajista que une los máximos decrecientes desde finales de enero y, sobre todo, porque tenemos mínimos y máximos crecientes de muy corto plazo. Y como me gusta decir... por un algún lado hay que empezar. Todo potencial cambio de tendencia empieza siendo un rebote sin importancia que con el paso del tiempo se convierte en algo más. Veamos pues, a ver qué nos dice el precio en las próximas semanas.
