Acerinox ha disparado su beneficio neto a los 203 millones de euros en la primera mitad del año, frente a los dos millones registrados en el mismo periodo del año anterior. Se trata así del mejor resultado de la compañía desde 2007.
- 9,530€
- 1,28%
- 23,900€
- -0,29%
Análisis Técnico
- S1
- 9.50
- R1
- 11.90
- R2
- 13
Corto plazo
Medio plazo
Largo plazo
A mediados-finales de junio, en pleno desplome de la acción por la venta del 7,9% del capital de la compañía por parte de Nippon Steel, nos preguntábamos si se trataba de la excusa perfecta para que el precio diera forma a un 'throw back' hacia la antigua zona de resistencia. Pero, ¿qué es un 'throw back?
Un ‘throw back’ es un movimiento por parte del precio donde este corrige para comprobar la fortaleza del que es el nuevo nivel de soporte, antes resistencia, que se ha superado recientemente al alza. De manera que, una vez el precio cae y se demuestra que no puede con el nuevo soporte, este suele reestructurarse de nuevo al alza. Resumiendo, puede decirse que un ‘pull back’ es un rebote para después caer, mientras que un ‘throw back’ consiste en corregir para después continuar subiendo.
Y eso es lo que tenemos en este momento en Acerinox. Un impecable apoyo en el nivel de precios que en su día actuó como resistencia: la parte alta del canal lateral-bajista por el que se venía desplazando la cotización desde 2015. Un 'throw back' de manual, de libro. Y ahora puede decirse que ya no hay resistencias importantes hasta los máximos anuales (11,90), los máximos de 2015 (12,37) y los máximos históricos de finales de 2006 en los 13,01 euros.