La agencia de calificación de riesgos Fitch Ratings ha emitido un comunicado en el que asegura que continúa el riesgo en Banco Espirito Santo (BES), aunque ya está contenido. Por su parte, las acciones de Espirito Santo han conseguido subir al cierre un 19,74% hasta los 0,4550 euros por título. ¿La razón? El respaldo que ha recibido por parte de sus accionistas que han afirmado que apoyarían una ampliación de capital.

Carlos Costa, gobernador del organismo portugués, declaraba esta mañana a TV1 que "desde luego que hay accionistas interesados en participar en una ampliación de capital". Además, aseguraba que el banco tiene "un colchón de capital para afrontar los riesgos"

Tras siete jornadas de caídas en bolsa, BES volvía este miércoles a dispararse apoyado por sus accionistas, aunque Fitch aún ve a esta entidad "vulnerable a una caída de confianza".

Fitch no obstante tranquiliza al calificar como "limitados" los riesgos directos para los grandes bancos portugueses que mantiene bajo su vigilancia (BCP, Santander Totta, Millenium BCP y Caixa Geral), dado que su exposición a Grupo Espirito Santo es "manejable", al igual que la exposición del sistema bancario portugués.

Sin embargo, advierte, "es posible que se mantenga la volatilidad de los costes de financiación hasta que la situación de Grupo Espirito Santo se clarifique y se resuelva".

En cuanto a un posible contagio al resto de la banca europea, la agencia considera que “el impacto sobre la banca de los países periféricos sólo debería ser temporal pero subraya la fragilidad de la opinión de los inversores sobre esta región”. En este contexto, el efecto más directo que aprecia Fitch es que “la continua incertidumbre podría enfriar la opinión de los inversores sobre la emisión de acciones de los bancos periféricos”.

L.G.

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