Sufre lesiones osteoarticulares en brazos y piernas
BARCELONA, 14 (EUROPA PRESS)
El Juzgado de los Social número 28 de Barcelona ha concedido una pensión por incapacidad permanente para su profesión habitual a un hombre de 44 años que trabajaba en un matadero y que perdió un dedo tras el tercer accidente laboral que sufrió, estimando la demanda del afectado contra el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
La sentencia, recogida por Europa Press, detalla que el hombre que trabajaba en un matadero cerca de Barcelona sufrió la amputación del índice de la mano izquierda por una herida que se infectó, tras un accidente laboral en 2015, que se suman a patologías osteoarticulares en brazos y piernas por otros accidentes de trabajo entre 2007 y esa fecha.
"Que el dedo amputado sea de la mano no dominante no es relevante" en un trabajo que requiere sujetar con ambas manos a un animal grande --vivo o muerto--, ha sostenido el juez, contradiciendo a los peritos de la Subdirecció General d'Avaluacions Mèdiques (SGAM) y de la mutua del INSS, que según ha explicado la entidad Tribunal Médico, consideraban que no había perdido función.
El juez recoge que el hombre tenía entre sus funciones sacrificar animales; desollar y descuartizar reses; deshuesar, cortar y preparar carne para venta o tratamiento; preparar ingredientes para fabricar salchichas y similares utilizando máquinas de cortar, y curar carne.
Ha determinado que, si según los peritos le queda una fuerza del 78%, ésta "no sería suficiente para una reincorporación efectiva a las tareas más peligrosas del matadero, que requieren del 78%, ni se habría declarado apto para tal trabajo" si hubiera acudido a una selección de personal.
La sentencia también recoge que el hombre alegó también "trastorno depresivo crónico agudizado", pero que se reseña en la demanda sin valoración del mismo a efectos de la incapacidad permanente, al haberse solicitado por las lesiones físicas.
Fuentes de Tribunal Médico han explicado a Europa Press que la sentencia no es firme, y que habitualmente el INSS suele recurrirlas.