BARCELONA, 7 (EUROPA PRESS)
El arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, ha mostrado este martes su sorpresa por que la Comisión para la prevención y reparación de abusos sexuales de menores impulsada por el Síndic de Greuges "solo" contemple a la Iglesia católica.
Lo ha dicho este martes en rueda de prensa después de que el Síndic de Greuges haya puesto en marcha un servicio especial para atender de forma específica a víctimas de abusos sexuales en el entorno de la Iglesia en el marco de la creación de esta comisión, que también prevé la creación de un teléfono gratuito y un correo electrónico.
El arzobispo de Barcelona ha subrayado que los abusos sexuales "se dan en otros estamentos y en porcentajes más elevados", por lo que ha abogado por defender a las víctimas en todos los ámbitos y estamentos.
"Una comisión que viene del Síndic de Greuges tendría que defender a todo el pueblo", ha remarcado Omella, quien ha abogado por la colaboración entre todos para erradicar la lacra de los abusos sexuales a menores.
Ha explicado que ha tenido reuniones con el Síndic de Greuges, Rafael Ribó, en las que le ha transmitido que no le parecía bien una comisión con un ámbito de actuación tan restrictivo, y ha remarcado que si no es una comisión para todas las víctimas "es un poco sectario".
Omella ha expresado su disposición a colaborar y trabajar por el bien común en colaboración con todas las instituciones, ayudar a las víctima de abusos, y ha recordado que ha llevado a los tribunales casos y que han cumplido las sentencias.
Respecto a casos en el que el delito haya prescrito, el Síndic de Greuges ha dicho esperar conseguir algún tipo de reparación, entendida como reconocimiento de los hechos, ante lo que Omella ha dicho que harán "lo que digan los jueces".
Además, en un comunicado, la Iglesia ha mostrado su apoyo a las mejoras de la protección de los menores planteadas por el Síndic de Greuges que estén dentro del marco de competencias que le otorga el Estatut y su labor de vigilancia de la actuación de la administración pública --el culto religioso es un ámbito ausente de sus competencias de supervisión, según la Iglesia--, y ha recordado que la investigación de delitos es una función que corresponde al poder judicial.