La Reserva Federal (Fed) ha puesto nuevas restricciones a la industria bancaria estadounidense después de que sus pruebas de estrés anuales encontrara que varios bancos podrían acercarse incómodamente a los niveles mínimos de capital en escenarios vinculados a la pandemia del coronavirus.
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La Reserva Federal dijo este jueves en un comunicado que los grandes bancos tendrán que suspender la recompra de acciones y limitar el pago de dividendos a su nivel actual para el tercer trimestre de este año. El regulador precisó que sólo permitirá el pago de dividendos en base a una fórmula vinculada a las recientes ganancias de un banco.
Además, la industria será objeto de un nuevo escrutinio: por primera vez en la década de los test de estrés, los bancos tendrán que volver a presentar sus planes de pago nuevamente a finales de año. El regulador no cierra la puerta a que este ciclo se tenga que repetir cada trimestre.
La reacción de la banca estadounidense no se hizo esperar este jueves. Wells Fargo cedió buena parte de sus ganancias previas y acabó cerrando con caídas del 3,3%. Goldman Sachs se dejó otro 3,9% y JP Morgan, un 1,9%.
"Mientras espero que los bancos sigan gestionando su capital y riesgo de liquidez de forma prudente, apoyando a la economía real, hay una incertidumbre material sobre la trayectoria que tomará la recuperación económica", asevera el vicepresidente de la Fed, Randall Quarles.
