El Ibex 35 ha subido un 1,16%, hasta 8.756 puntos, tras dibujar este lunes una figura que "al final no fue mala", según apuntan los expertos de Bolsamanía. El selectivo terminó el día con caídas pero lejos de mínimos intradía, y acabó dando forma a una figura de rebote que ha tenido continuación este martes.
El Ibex 35 y el resto de bolsas europeas han estrenado la semana con fuertes caídas en medio del temor que está generando en todo el mundo la posible quiebra del gigante inmobiliario Evergrande. Sin embargo, el selectivo español ha conseguido limitar las caídas gracias al rebote del sector turístico y pese a la presión bajista de los bancos. El selectivo español ha caído un 1,20%, hasta los 8.655,40 puntos, tras marcar un mínimo intradía en 8.551 enteros. Por su parte, el resto de bolsas europeas ha cedido alrededor del 2%, mientras Wall Street baja más del 1%.
El Ibex 35 ha subido un 0,31%, hasta los 8.760,9 puntos, y ha dado continuidad a las ganancias del jueves. Esto, en el cierre de una semana de idas y venidas que ha estado marcada por la subida del precio de la energía. En España, el selectivo se ha visto muy condicionado por esta circunstancia tras las medidas del Gobierno para frenar la escalada de precios y su impacto en las grandes eléctricas (Endesa e Iberdrola) y también en las renovables (Acciona, Solaria, Grenergy, Audax...). Aunque gracias a las ganancias de las dos últimas jornadas, el selectivo ha cerrado la semana con subidas del 0,75%, en una sesión en la que el resto de grandes bolsas europeas ha cerrado en rojo.
El Ibex 35 ha rebotado un 1,14%, hasta 8.733,70 puntos, tras el batacazo de la pasada jornada, cuando se dejó un 1,65% impactado por las fuertes caídas en las eléctricas (Endesa e Iberdrola). La 'crisis de la luz', que ha generado una guerra abierta entre uno de los principales sectores de nuestro país y el Gobierno, está impactando en toda la bolsa española, toda vez que la imagen global que se está transmitiendo, especialmente hacia el extranjero, no es en absoluto tranquilizadora y no invita a invertir, desde luego.