Walt Disney, el mayor conglomerado mundial de entretenimiento, sube un 3% en el Dow Jones después de superar anoche las previsiones del consenso con los resultados de su cuarto trimestre fiscal.
Reed Hastings se palpa los bolsillos. Y lo nota. Le faltan 4.000 millones de dólares. Los que le hizo perder Disney+ a Netflix en capitalización con su debut en el streaming. La compañía del ratón animado lo celebró disparándose un 7%, es decir, sumando 13.000 millones a su valor en bolsa. Escepticismo. Ese era el denominador común entre los analistas antes de su estreno. Ahora, reculan. "Se nos salieron los ojos de las órbitas", reconoce Dan Ives de Wedbush.