Estreno de Perdóname Señor ¿Qué os ha parecido?

Telecinco hizo debutar ayer noche a su miniserie Perdóname Señor con el principal reclamo de ver a Paz Vega interpretando a una monja en un Barbate repleto de narcos y traficante, y  aunque podría contar con una de las tramas más intensas de la temporada lo cierto es que su primer episodio se ha quedado «a medio gas».

Teniendo en cuenta que venimos de El Príncipe, serie con la que se podría comparar a Perdóname Señor sin problema alguno (de hecho tanto Jesús Castro como Stanny Coppet aparecen en las dos ficciones), parece que la audiencia va a tener que hacer cierto esfuerzo por adentrarse en la trama que ahora se plantea sin que como digo se acabe comparando un tipo de ficción que además Mediaset ya ha «explotado» muchísimo ya sea con la mencionada El Príncipe, con aquella Sin tetas no hay paraíso y como no con El Niño, película que por cierto podría haber generado a Rafa personaje que ahora interpreta Castro y que es prácticamente el mismo que ya intepretó en el éxito de taquilla.

Al margen de que Castro se haya quedado (y eso que es un actor muy joven) para hacer siempre el mismo papel, si por algo destaca Perdóname Señor es por sus localizaciones en pleno Barbate, y aunque la luz y los escenarios naturales juegan a favor de obra, parece increíble que cada vez que se realiza una ficción ubicada en el Sur, esta suele centrarse en la corrupción, las drogas y la mala vida (para cuando una serie sobre esas señoras que trabajan en la conservera que aparece en uno de los momentos de este primer episodio).

Rafa (Jesús Castro) es el primer rostro que vemos en pantalla cuando arranca el episodio, y  desde ese momento nos damos cuenta que algo relacionado con el narcotráfico va a pasar. Ver al actor sobre su moto, una playa y una lancha motora que se acerca a la orilla parece un calco de cualquier escena de El Niño, pero esta vez y con acierto tenemos además al gran Antonio de La Torre, que interpreta a El Rojo, el «capo» de andar por casa al mando de la operación «playera» de la que es testigo además Lucía, que ha dejado el habito en casa para irse a tomar el sol a la playa.

Así comienza Perdóname Señor y así nos adentramos en un drama en el que la droga queda en segundo plano cuando (casi) conocemos la historia de la monja Lucía, cuya vocación le llegó tras quedarse embarazada de Bruno (el narco que es ahora el personaje de Coppet), y dar a luz a Rafa.

La joven convertida en monja dejó a su hijo al cargo de su hermano (el pescador al que da vida Paco Tous) y de la esposa de este (que trabaja en la mencionada conservera), y se fue a Roma sin aparentemente decirle a Bruno que era padre…

Todo esto no aparece pero nos lo cuentan de manera velada y entonces entendemos el porqué de esa eterna cara de tristeza que presenta Paz Vega en cada plano y que no sea capaz de enfadarse realmente con su hermano cuando se entera que este se ha «bebido» todo el dinero que ha ido enviando a su familia en los últimos 20 años.

El episodio acaba con Rafa y Lucía en un enfrentamiento en el que el primero huye cuando Bruno va a por él (la serie se erige en el cruce de bandas que luchan por hacerse con el control del narcotráfico), y la segunda acaba en el suelo debido a un golpe. Es entonces cuando Bruno se reencuentra con Lucía, su primer y único amor y cuando este la lleva al hospital para que se recupere.

La serie flaquea en varios aspectos debido a que lo que plantea no resulta novedoso, hasta el hecho de que Rafa se enamore de la hija de quien está al cargo de investigar todo el asunto con las drogas, resulta manido y aunque tiene grandes actores y unas localizaciones espectaculares, su trama da para poco. De todos modos no desesperemos porque acertadamente lo nuevo de Telecinco se plantea como una miniserie y esperemos que sepan sacarle partido a su duración limitada.