Westworld despide su segunda temporada con muchas incógnitas y su co-creadora avanza los primeros detalles de lo que veremos en la tercera

¡¡¡ENTRADA CON SPOILERS DEL FINAL DE LA SEGUNDA TEMPORADA!!!!

Desde el momento en que el Dr. Robert Ford (Anthony Hopkins) murió al final de la temporada 1 de Westworld, se ha producido un apocalipsis de robots a lo largo de esta temporada pasada, con huéspedes y humanos como daños colaterales. Y aunque el equipo SWAT de Delos parece haber sofocado el alzamiento de Androides, nos quedamos con la noción al final del episodio 20 de hora y media de esta noche, «The Passenger», escrito por los creadores Jonathan Nolan y Lisa Joy, y dirigido por Frederick EO Toye, que nuestro mundo está a punto de ser despertado por personajes como robo-Dolores (Evan Rachel Wood), robo-Charlotte Hale (Tessa Thompson) y el venerable anfitrión Bernard (Jeffrey Wright).

Sin embargo, la parte más discordante del final de la segunda temporada de la serie de HBO ayer noche vino en el epílogo tras los créditos finales. Las dudas sobre la humanidad del Hombre de Negro (Ed Harris) y si su hija Emily (Katja Herbers) incluso murió en el penúltimo episodio.

De este modo vemos como llega al centro neurálgico de Forge del parque en ruinas y se encuentra en un estudio similar donde el anfitrión del dueño del parque, James Delos, fue probado (y falló). Encontramos a Emily cuestionando la realidad de Black, un rol típicamente reservado para un ser humano. Ella le informa que él no está viviendo en una simulación, y que ella tiene que verificar su diagnóstico de «fidelidad». Aunque Emily fue escaneada como humana en el episodio 19, toda esa tecnología es en vano ya que vemos a robo: Charlotte frustra los escáneres mientras navega hacia el mundo real.

Antes de todo esto, Maeve (Thandie Newton) intenta conducir a los anfitriones al Valle del Más Allá en una metáfora muy parecida a la de Moisés. Similar a la forma en que el cielo se describe en la Biblia, el Valle Más Allá es un lugar similar: muchos son llamados, pero pocos son elegidos para pasar a través de la puerta de agujas de alfiler del cielo. Aquellos que hacen el cambio incluyen a la hija de Maeve y al guerrero de la Nación Fantasma Akecheta (Zahn McClarnon) y su ser querido. Su puente está cerrado, y Westworld está inundado por Dolores (de ahí la imagen en el estreno de la temporada 2 donde vemos a los anfitriones ahogados en un lago). Mientras tanto, Bernard, quien como anfitrión tiene todo el libre albedrío que un ser humano podría envidiar, dispara a Dolores, le permite a robo-Charlotte disparar al verdadero Hale antes de huir del parque en bote. Ella resurge con Dolores y Bernard en la casa opulenta de este último que se encuentra junto al Parque Central de una ciudad.

La serie se despide dejando muchas dudas y sobre todo que queramos saber más no solo sobre el Hombre Negro, sino ese Valle Más Allá y que pasará a partir de ahora. De momento deberemos esperar a la tercera temporada que posiblemente veamos en un año, aunque la creadora Lisa Joy ya ha avanzado que una de las primeras cuestiones que veremos al comenzar la próxima temporada será saber de que modo Dolores en realidad lo que hizo fue hacerse pasar por Hale, así que vamos a saber también donde está realmente Hale.

Por otro lado, en una de las escenas del final de temporada, vemos como Charlotte escapa con una bolsa llena de perlas de The Forge. Joy ha avanzado que la próxima tercera temporada sabremos que «En esas perlas hay un puñado de anfitriones que está sacando del parque de contrabando. Qué anfitriones son, los exploraremos.»

Además, volviendo al epílogo, parece que es una visión de futuro de lo que pasará con el Hombre de Negro en la tercera temporada, aunque no se ha querido avanzar más detalle de eso mientras que parte de lo que veremos en la próxima entrega será una «investigación del mundo real», a través sobre todo de los ojos de Bernard, recién escapado y como quizás solo quizás veremos alguna que otra copia de personajes anfitriones….