Netflix causa polémica por tener demasiadas series con gente fumando
La series originales de Netflix contienen el mayor número de representaciones de fumadores, de lejos, entre los programas de televisión que son populares entre los jóvenes, según un nuevo estudio del grupo antitabaco Truth Initiative.
Los shows de Netflix han sumado 319 «incidentes de tabaco», más del doble que las series de televisión abierta y de televisión por cable, que han tenido 139, según el análisis de series de la organización con respecto a la temporada 2015-2016.
La primera temporada de Stranger Things, un éxito rotundo para Netflix, tuvo 182 «incidentes» de tabaco, el total más alto entre los programas examinados. La número 2 fue The Walking Dead de AMC, con 94 escenas que muestran el uso del tabaco, seguida de cuatro shows de Netflix: Orange Is the New Black (45), House of Cards (41), Fuller House (22 ), y la docu-series Making a Murderer (20), de acuerdo con Truth Initiative.
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Prueba gratis Prime VideoModern Family de ABC tuvo 20 «incidentes de tabaco» durante la temporada 2015-16; American Horror Story de FX tuvo 15; y Unbreakable Kimmy Schmidt de Netflix tuvo nueve, según Truth Initiative. La organización también examinó la temporada 2 de Marvel’s Daredevil de Netflix y no encontró representaciones del consumo de tabaco.
Cuando se le pidió un comentario, un representante de Netflix dijo: «Si bien la transmisión de entretenimiento es más popular que nunca, estamos contentos de que fumar no lo sea. Estamos interesados en saber más sobre el estudio «. Truth Initiative publicó el estudio ayer viernes.
De los programas de Netflix citados, Stranger Things, Making a Murderer y Unbreakable Kimmy Schmidt son calificados como TV-14 por Netflix (apto para espectadores de 14 años o mayores), mientras que House of Cards y OITNB tienen la calificación TV-MA (solo para adultos). Fuller House está calificado como TV-Y7, destinado a audiencias de más de 7 años.
En general, de acuerdo con el análisis del grupo el 79% de los programas de TV analizados muestran de forma destacada el tabaquismo. La organización analizó 14 series que fueron las más populares entre los consumidores estadounidenses de entre 15 y 24 años, según los datos de muestras de origen nacional.
El grupo dice que el uso del tabaco es más frecuente en el contenido digital que la televisión tradicional. Y eso es preocupante porque los consumidores más jóvenes han gravitado hacia los servicios de transmisión como Netflix mientras ven televisión menos tradicional, señaló. Truth Initiative citó un estudio de UC San Francisco de los mejores programas de TV 2015-16 en el que encontraron que el 54% de los shows de Netflix, Amazon y Hulu se asociaron con incidentes de tabaco, en comparación con el 38% de los programas de televisión transmitidos y el 22% de televisión por cable muestra.
El aumento de los servicios de VOD por suscripción ha resultado en «un resurgimiento generalizado del tabaquismo en las pantallas que es atractivo y renormaliza un hábito mortal para millones de jóvenes impresionables», dijo Robin Koval, CEO y presidente de Truth Initiative, en un comunicado.
Entre las medidas, Truth Initiative se esbozó para tomar medidas al respecto: trabajar con los productores para excluir las imágenes de tabaco de los espectáculos; hacer cumplir las clasificaciones más estrictas de las pautas parentales para el contenido que incluye el consumo de tabaco; y cambiar las políticas estatales de subsidio a la producción cinematográfica para proporcionar incentivos fiscales y de otro tipo para producciones que no promueven el consumo de tabaco.
Truth Initiative ha estado entre los principales grupos que instan a Hollywood a suspender o reducir las representaciones de fumar. El año pasado, la MPAA anunció que consideraría escenas que muestran que los adultos fuman (junto con el contexto histórico) como un factor en las decisiones sobre las calificaciones de las películas. Según una investigación citada por Truth Initiative, el 37% de los jóvenes que inician el hábito de fumar en los EE. UU. es atribuible a la exposición al tabaco en las películas.
La organización antitabaco basada en Washington, DC (anteriormente conocida como Legacy) es financiada por la industria tabacalera, formada a través del histórico acuerdo de conciliación de 1998 entre los fiscales generales de los Estados Unidos y las compañías tabacaleras.