Juego de Tronos despide su séptima temporada con muertes, amenazas y la revelación más esperada

¡¡¡¡ENTRADA CON SPOILERS!!!!! ¡¡¡¡REVIEW DEL 7X07!!!!

Juego de Tronos ha emitido por fin (en Estados Unidos) el final de su séptima temporada y lo cierto es que tras la grandísima entrega que ha ofrecido la serie de HBO, parece que para muchos fans «The Dragon & The Wolf» ha sido un episodio a la altura aunque también ha dejado una sensación agridulce.

Aquellos que esperaran poder ver la «gran batalla» contra los White Walkers, por parte de la alianza entre Jon Snow y Daenerys quizás se hayan sentido algo decepcionados, si bien esta finalmente se ha quedado en un pequeño avance de lo que evidentemente veremos en la octava y última temporada.

De todos modos esta «season finale» ha estado a la altura en otros aspectos y de hecho, ha sido un episodio (de casi 80 minutos) en el que entre otras cosas hemos podido ver como las alianzas y las traiciones siguen estando a la altura tanto en el Norte como en el Sur.

Así Cersei Lannister (Lena Headey) ha tenido a bien recibir a Daenerys Targaryen(Emilia Clarke) y Jon Snow (Kit Harington), y aunque tras ver con sus propios ojos a un muerto resucitado en forma de caminante, y decir que lucharía en el Norte junto a sus nuevos «aliados», lo cierto es que en sí misma tan solo concibe su propia seguridad y la de su futuro hijo con Jaime (Nikolaj Coster-Waldau) al que no duda en traicionar también.

Por otro lado, Littlefinger (Aidan Gillen) ha sido ejecutado en Winterfell (Invernalia), de modo que los fans que pensaron que las hermanas Stark, Arya (Maisie Williams) y Sansa (Sophie Turner) iban a despellejarse entre ellas se habrán quedado de piedra al comprobar que las dos, junto a  Bran Stark (Isaac Hempstead-Wright), estaban aliadas para acabar por fin con un personaje que no ha dejado de manipular por sus propios intereses.

El episodio final de esta temporada ha servido además para ver otro momento esperado. Jon y ‘Dany’ reconociendo sus sentimientos y estando juntos, pero todo mientras Bran y Sam Tarly (John Bradley-West) descubrían la verdad sobre el Rey en el Norte. Ahora ya sabemos qué pasó realmente con el «hijo bastardo» que en realidad no lo es.

Antes de la escena entre Bran y Sam sabíamos que Jon es el hijo bastardo de Rhaegar Targaryen y Lyanna Stark, su tía, pero la secuencia a servido para que Sam recuerde lo que decían los pergaminos que tradujo en la Ciudadela como castigo tras curar de la psoriagrís a Jorah Mormont (Iain Glen) y que Gilly (Hannah Murray) leyó sin ser conscientes de lo que descubrían.

Según los papeles que revisó durante su estancia con los maestres, Rhaegar se divorció de Elia Martell, la mujer con la que tuvo dos hijos, y se casó en secreto con Lyanna Stark, en Dorne, en una ceremonia oficiada por el mismo alto septón de entonces. Por tanto, Jon no es ningún Sand. No es un bastardo del sur. Jon es hijo legítimo y para confirmarlo, Bran visitó el mismo día de la ceremonia gracias a sus visiones.

Además, Bran volvió a la Torre de la Alegría, donde escuchó a Lyanna decirle a su hermano Ned que su hijo no es Jon, es Aegon, el mismo nombre del Targaryen que conquistó los Siete Reinos hace más de un siglo. Y Ned Stark juró con su vida proteger al hijo de su hermana, haciéndolo pasar como suyo.

Así Jon y Dany son parientes y mientras descubríamos esto, las escenas de ambos juntos en la cama habrán dejado sobrecogido a más de uno y a ellos mismos cuando sepan de su incesto (se supone que Bran se lo dirá a Jon) cuando veamos la octava temporada.

A la espera de ese momento, la séptima temporada se ha despedido avanzando la batalla que finalmente no ha sido, y aunque como ya he mencionado los fans se habrán quedado decepcionados (los muchos memes en Twitter al respecto lo dicen todo), lo cierto es que ver a esos caminantes llegando al muro para cruzarlo, acompañados de Viserion junto al Rey de la Noche, y a Tormund (Kristofer Hivju) y Beric Dondarrion (Richard Dormer) corriendo por salvar sus vidas (no sabemos qué habrá pasado con ellos ya que Viserion lo destruye todo) bien merece ser uno de los mejores «cliffhangers» que hayamos visto nunca y que nos deja a todos pendientes y expectantes ante una temporada final que promete ser la MEJOR de todas.