The Walking Dead retoma su sexta temporada con uno de sus mejores episodios
¡¡¡REVIEW DEL EPISODIO. TIENE SPOILERS!!!
«No Way Out» ha sido el episodio de regreso de la sexta temporada de The Walking Dead y los fans pueden estar contentos ya que la espera, sin duda, ha merecido la pensa.
Podíamos pensar que el episodio giraría en torno a la primera amenaza de los hombres de Negan, pero siendo realistas, era evidente que tenía que estar centrado en cómo Rick y los suyos iban a poder liberar Alejandría del asedio de caminantes y así ha sido.
Con un comienzo en el que se ha podido ver como Daryl, Sasha y Abraham se libraban de los «Saviors» con los que se topan en la carretera, la acción se ha centrado como digo en Alejandría y en unos momentos en los que los seguidores de los cómics habrán comprobado como el episodio ha tenido momentos calcados a lo leído previamente en las viñetas, algo que no ha sucedido muchas veces y que a estas alturas era de agradecer.
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Prueba gratis Prime VideoLa filtración, hace un par de semanas, de un poster en el que se podía ver a Carl sin un ojo, marcaba un episodio en el que se ha confirmado dicha información. El hijo de Rick ya no tiene ojo, y todo por culpa de Sam que asustado por los caminantes acaba siendo devorado por estos. Su madre, JessIe, incapaz de ver como su pequeño estaba siendo devorado, comienza a gritar, lo que provoca que la escapada entre los muertos se convierta en un peligro. Jessie también acaba siendo cogida por los Walkers.
En ese momento Rick no puede creer lo que está viendo. De nuevo ha perdido a alguien que le importaba. Como le sucedió con su mujer, De hecho con las duras imágenes de Jessie siendo atacada, vemos otras en las que aparece sonriendo, cuando ella y Rick se conocieron y desarrollaron su amistad.
De vuelta a la noche en Alejandría, Carl se da cuenta de que va a correr la misma suerte que Jesse ya que esta le tiene cogido y no le suelta. Por ello, Rick no tiene más remedio que cortar la mano de su amada. Con ello provoca que Ron dispare a Rick pero el tiro acaba en el ojo de Carl, antes de que vuelva a disparar Michonne acaba con la vida del joven.
Tras este intenso momento, el episodio se convierte en una espiral de emociones en las que vemos como Rick, desquiciado, decide acabar él mismo (y cuando ya todos estaban a salvo) con los Caminantes. Se enfrenta a ellos, y aunque pone en riesgo su vida y se podría haber visto su muerte, su grupo no le deja solo e incluso el resto de Alejandría sale a luchar con él. Todos a por los caminantes en algunos de los mejores momentos que la serie nos ha regalado hasta la fecha.
Por otro lado, Denise y el lobo que le había secuestrado son asaltados por los Walkers, de hecho él acaba siendo mordido y cuando ella le dice que le puede salvar si le acompaña a la enfermería, Carol le dispara y acaba con su vida.
El único «pero» que le podemos encontrar al episodio ha sido el que el esperado reencuentro de amor entre Glenn y Maggie no haya sido tal, sino que en realidad él casi «vuelve» a morir cuando intenta salvar a su amada. Suerte que en el momento en el que nos tememos lo peor, Abraham y Sasha abren fuego con sus armas. Su llegada es sin duda triunfal y permite, que Daryl pueda provocar un incendio que acaba con todo. Con ello Rick y los demás pueden terminar su lucha. Ahora Alejandría es un lugar repleto…de cadáveres y nuestro protagonista un hombre, convencido más que nunca que el único modo de salir adelante es haciendo piña entre todos y actuando como grupo.