
El Banco de Inglaterra (BoE) ha lanzado este lunes sus pruebas de resistencia (test de estrés) al capital bancario de 2025 para las siete entidades financieras más grandes y sistémicas de Reino Unido.
Los resultados de la prueba, que evalúa si los bancos cuentan con suficiente capital para afrontar impactos teóricos, se publicarán en el cuarto trimestre de este año, informa el BoE.
Las siete entidades examinadas en la edición de 2025 serán Barclays, HSBC, Lloyds Banking Group, Nationwide, NatWest Group, Santander UK y Standard Chartered, que en conjunto representan el 75% de los préstamos del sistema bancario británico
"La prueba involucra un escenario de estrés hipotético que evaluará la resistencia del sistema bancario de Reino Unido ante recesiones profundas y simultáneas en la economía nacional y global, fuertes caídas en los precios de los activos, mayores tasas de interés globales y un nivel elevado de costes por malas prácticas," señaló el Banco de Inglaterra en un comunicado.
Con estas pruebas, el BoE busca garantizar que los bancos absorban en lugar de amplificar los impactos económicos y mantengan la capacidad de atender a hogares y empresas de Reino Unido.
El Banco de Inglaterra ha precisado que el escenario de estrés no es un pronóstico de las condiciones macroeconómicas y financieras, sino un escenario de "riesgo extremo" diseñado para ser lo suficientemente severo y amplio como para que el Comité de Política Financiera (FPC) y el Comité de Regulación Prudencial (PRC) evalúen la resistencia de los bancos británicos ante una variedad de impactos negativos.
"No se trata de eventos esperados o probables, sino de un escenario teórico utilizado para fortalecer la estabilidad financiera y la solidez del sistema bancario de Reino Unido. Es distinto de los escenarios que el Comité de Política Monetaria podría emplear para analizar las incertidumbres en sus previsiones".
El FPC y el PRC utilizarán esta prueba como una herramienta clave para evaluar la solidez del sistema bancario británico. Sus resultados servirán para ajustar los requisitos de capital de los bancos participantes y del sistema bancario en general, además de mejorar la comprensión de los riesgos en el sector.
Esta será la primera prueba de resistencia desde la finalización de los arreglos transitorios de la Norma Internacional de Información Financiera 9 (IFRS 9), introducida en 2018. El FPC ha determinado que este cambio en las normas contables no debería generar un aumento injustificado en los requisitos de capital para los bancos de Reino Unido.