El sentimiento económico de Alemania bajó en noviembre, mientras las valoraciones sobre la situación económica actual también son cada vez más pesimistas. "La victoria de Donald Trump y el colapso de la coalición de gobierno han ensombrecido las expectativas económicas para Alemania", señala el indicador ZEW.
En concreto, en el undécimo mes del año, el sentimiento económico se sitúa en 7,4 puntos, lo que supone 5,7 puntos por debajo del valor del mes anterior, y la valoración sobre la situación actual bajó 4,5 puntos, con lo que ahora se coloca en -91,4 puntos.
"El sentimiento económico ha empeorado y es probable que el resultado de las elecciones presidenciales estadounidenses sea la principal razón de ello. El hecho de que las expectativas económicas para EEUU estén mejorando claramente, mientras que el sentimiento económico para China y la eurozona está cayendo, respalda esta opinión", explica el presidente del ZEW, el profesor Achim Wambach.
Sin embargo, añade que, "en los últimos días de la encuesta se escucharon voces más optimistas que esperaban que las perspectivas económicas para Alemania mejoraran con las elecciones anticipadas en el horizonte". "En general, lo que estamos observando actualmente es un desarrollo muy dinámico de las expectativas económicas", añade.
Por otro lado, en cuanto a la eurozona, la percepción de los expertos del mercado financiero sobre la evolución económica se redujo y ahora el indicador se sitúa en 12,5 puntos, perdiendo 7,6 puntos en comparación con octubre. Mientras, la valoración de la situación económica actual apenas cambia y el indicador cae 3,0 puntos, hasta el valor de -43,8 puntos.
Los analistas de Oxford Economics comentan que la encuesta se realizó durante la semana en la que las elecciones estadounidenses dieron como resultado una victoria de Trump, lo que significa mayores aranceles para los productos de la eurozona en los próximos años.
"El sentimiento en Alemania probablemente empeoró por la ruptura de la coalición", pues esto significa "una mayor incertidumbre política y fiscal en el corto plazo antes de las nuevas elecciones que probablemente se celebren el 23 de febrero del próximo año", dicen.
Creen que las empresas evalúan su exposición a los recientes eventos geopolíticos: "Después de todo, los posibles aranceles estadounidenses sobre los productos de la eurozona aún están sujetos a debate político y es poco probable que afecten a la industria en el corto plazo".