El huracán Helene ha dejado devastadoras consencuencias a su paso por Estados Unidos. Las víctimas mortales superan los 100 fallecidos, los desaparecidos se cuentan por centenares y algunas zonas del país han vivido inundaciones, apagones masivos o han visto cómo las carreteras quedaban bloquedas.
Este fenómeno meteorológico ha causado grandes estragos en cinco estados del sureste del país y, aunque va perdiendo fuerza y ha sido degradado a ciclón postropical, según ha informado el Centro de Predicción Meteorológica, las autoridades continúan trabajando ya que se espera que siga provocando fuertes lluvias en el sur de la cadena montañosa de los Apalaches hasta este martes.
Helene entró como un huracán de categoría 4 por Florida el pasado jueves por la noche, dejando a Carolina del Norte, donde se concentran la mayoría de fallecidos, como uno de los estados más perjudicados. De hecho, el Gobierno ha autorizado una declaración de "gran desastre" para agilizar las tareas de asistencia.
La localidad de Asheville, ha sido otra de las grandes afectadas al verse parcialmente sumergida, con sus casas destrozadas y calles llenas de escombros. El gobernador, Roy Cooper, ha explicado que las fuertes lluvias que han provocado deslizamientos que arrasaron carreteras, tumbaron postes de la luz y torres de telecomunicaciones a su paso hacia las zonas residenciales.
Asimismo, más de 1.700 vuelos han salido con retraso este sábado y unos 160 han sido cancelados. Los aeropuertos más afectados fueron los de Asheville y Charlotte (Carolina del Norte), y Atlanta y Augusta (Georgia), según el portal Flightaware.
El presidente de EEUU, Joe Biden, ha ofrecido sus condolencias a las víctimas y familiares de este fenómeno a través de un mensaje en X (antes Twitter) en el que ha denominado como "sobrecogedora" la devastación del huracán Helene y ha anunciado una declaración de emergencia para Tennessee.