Las acciones de Aston Martin han caído con fuerza (-5,47%) en la bolsa británica después de que el fabricante de automóviles de lujo haya recortado su previsión de beneficios por segunda vez en apenas dos meses debido a los retrasos en las entregas de algunos modelos Valiant. En lo que va de año, Aston Martin ha perdido más de la mitad de su valor en bolsa.
La compañía espera ahora que el EBITDA ajustado de 2024 se sitúe entre los 270 y los 280 millones de libras, por debajo de las estimaciones de los analistas y de los 305,9 millones de libras registrados el año pasado.
Asimismo, Aston Martin ha indicado que espera entregar "alrededor de la mitad" de los 38 modelos ultraexclusivos Valiant para finales del año. Anteriormente, la firma esperaba haber entregado la práctica totalidad de esta cifra al cierre del ejercicio. "Estamos tomando acciones decisivas para posicionar mejor al grupo de cara al futuro, incluyendo un perfil de producción y entrega más equilibrado en los próximos trimestres", ha afirmado Adrian Hallmark, consejero delegado de Aston Martin. Hallmark, ex de Bentley, es el cuarto CEO de Aston Martin desde 2020.
Como decimos, el fabricante inglés ya había reducido su previsión de beneficios el pasado mes de septiembre, culpando a las interrupciones de la cadena de suministro y a la débil demanda de China de este recorte de las previsiones. Debido a esto, la firma anunció que produciría y vendería 1.000 vehículos menos en este año fiscal.
Con todo, la compañía reiteró alguno de los objetivos para el ejercicio 2025, entre los que se incluye una previsión de ingresos cercana a los 2.500 millones de libras, un margen bruto superior al 40% y un EBITDA ajustado cercano a los 800 millones de libras. La compañía también espera que el margen EBITDA se sitúe cerca del 30% y que el flujo de caja libre sea "sosteniblemente positivo".
Por otro lado, la compañía ha anunciado que emitirá nuevas acciones y deuda por cerca de 210 millones de libras para "apoyar el crecimiento" de la firma y para "aumentar su liquidez". La firma británica ha detallado que 111 millones de libras corresponden a la emisión de nuevas acciones a 100 peniques cada una (por debajo del precio de cierre de 108 peniques del martes 26 de noviembre) y alrededor de 100 millones de libras en deuda.
Esta última ronda de financiación debería dejar a Aston Martin con una liquidez de unos 500 millones de libras a finales de año, según la empresa. El consorcio Yew Tree de Lance Stroll, presidente ejecutivo de la compañía, suscribió parte de la colocación de acciones. Según los analistas de Berenberg, este aumento de capital es menor de lo esperado.
"Aston Martin ha hecho enormes progresos estratégicos desde que el Yew Tree Consortium invirtió por primera vez en la compañía en 2020, transformando nuestra oferta de productos, revitalizando nuestra marca y acelerando nuestras operaciones comerciales hacia adelante. Con el firme respaldo de los accionistas estratégicos de Aston Martin y del Consejo, Adrian dirige ahora la compañía hacia un emocionante 2025 con un balance más fuerte y resistente, preparando a Aston Martin para ofrecer valor a largo plazo a todas las partes interesadas", ha señalado Stroll.
Aston Martin fue rescatada por Lawrence Stroll en 2020 y ha realizado varias ampliaciones de capital desde que se hizo cargo. Estas han convertido a la china Zhejiang Geely Holding y al Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí (PIF, por sus siglas en inglés) en accionistas de referencia de la icónica marca.
