El presidente de EEUU, Donald Trump, ha instado al titular de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, a recortar los tipos de interés ante el descenso de los precios de la energía y la inflación, al tiempo que le ha pedido que deje de "jugar a la política".
"Este sería el momento perfecto para que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, recortara los tipos de interés. Siempre llega tarde, pero ahora podría cambiar su imagen, y rápidamente", ha publicado el mandatario estadounidense en su red social, Truth Social.
"Los precios de la energía han bajado, los tipos de interés han bajado, la inflación ha bajado, incluso los huevos han bajado un 69%, y el empleo ha aumentado, todo en dos meses: ¡UNA GRAN VICTORIA para Estados Unidos! ¡BAJA LOS TIPOS DE INTERÉS, JEROME, Y DEJA DE JUGAR A LA POLÍTICA!", ha añadido.
Pero, al menos de momento, Powell se mantiene al margen de los cometarios de Trump y durante un discurso pronunciado en Virginia ha alertado sobre los efectos de los aranceles, ya que considera que "serán bastante más altos de lo esperado y provocarán más inflación y menos crecimiento".
"Si bien la incertidumbre sigue siendo alta, ahora se hace evidente que los aumentos arancelarios serán significativamente mayores de lo previsto. Es probable que lo mismo ocurra con los efectos económicos, que incluirán una mayor inflación y un crecimiento más lento", ha afirmado.
Por ello, y en vista de que todavía es complicado precedir el impacto que las nuevas tarifas tendrán sobre la primera economía del mundo, el presidente de la Fed ha optado por la cautela en lo que las bajadas de tipos se refiere.
"Seguiremos monitoreando cuidadosamente los datos entrantes, la evolución de las perspectivas y el balance de riesgos. Estamos bien posicionados para esperar una mayor claridad antes de considerar cualquier ajuste a nuestra postura política. Es prematuro predecir cuál será la trayectoria adecuada para la política monetaria", ha dicho.
Esto, en un momento de desplome bursátil por la guerra comercial que Trump ha desatado con los aranceles recíprocos anunciados en el 'Liberation Day'. China ya ha respondido con tasas de represalia del 34% a todos los bienes importados de Estados Unidos a partir del 10 abril.
