Otro sector puede verse afectado por la tensión comercial entre China y la Unión Europea (UE): el del lujo. La posibilidad de que el gigante asiático imponga un impuesto sobre estos bienes enturbia las perspectivas. "Acentuamos la cautela en el sector".
Así lo advierten desde el departamento de análisis de Bankinter, que ven que si estos impuestos se implementan "las compras de lujo por parte de los chinos se podrían seguir produciendo parcialmente en Japón, donde además la debilidad del yen estimula las compras, pero los márgenes en esta región son menores pues los alquileres son variables".
"Las perspectivas del sector se enturbian más en el corto plazo debido a estos riesgos", dicen.
China podría estar considerando aplicar un impuesto extraordinario del 100% sobre productos de lujo que no entraría bajo el escrutinio de la Organización Mundial del Comercio al no ser un arancel sino un impuesto interno que supuestamente no afecta al comercio.
Además, entra dentro de las medidas del gobierno chino de aumentar la recaudación, fomentar el progreso común y promover una redistribución de la riqueza. Como señalan desde la entidad, únicamente las exportaciones de estos productos desde Francia, Italia y España totalizaron 10.000 millones de euros el año pasado.
En su opinión, estas medidas "restan aún más visibilidad a la recuperación de las ventas del sector en China", donde se genera alrededor del 30% de las ventas mundiales del país y "pone en peligro las perspectivas de crecimiento del sector".
Centrándose en las compañías del lujo, los expertos de la entidad recomiendan llevar a cabo una inversión selectiva en el sector.
De hecho, únicamente tres compañías cuentan con una recomendación de 'compra' por su parte. Se trata de LVMH, EssilorLuxottica e Inditex. Por otro lado, aconsejan 'vender' Kering y se posicionan con un 'neutral' para Hermés, L'Oreal y Richemont.
