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Las acciones de Boeing han caído un 2,10% este martes en Wall Street después de que la compañía informara de una caída en las entregas de aviones durante 2024, un curso que se ha visto marcado por la crisis de seguridad en su modelo 737 MAX y por la huelga que sus trabajadores protagonizaron en EEUU en el último trimestre del ejercicio.
En concreto, la compañía entregó un total de 348 aviones en el curso, lo que representa una caída desde los 528 envíos del pasado ejercicio y supone el nivel más bajo desde 2021.
A pesar de la crisis de seguridad, el 737 volvió a ser, un curso más, el modelo más vendido por el fabricante estadounidense, ya que representó 265 entregas de las 348 totales. La compañía reinició la producción de este avión a mediados de diciembre, aproximadamente un mes después del fin de la huelga de más de siete semanas de duración que llevaron a cabo los trabajadores de la fábrica de Seattle (EEUU).
Tras esta reanudación de la producción, la compañía entregó un total de 36 aviones 737 en el último trimestre del año, por lo que fue otra vez el modelo más popular con más de la mitad de las 57 entregas que Boeing realizó entre octubre y diciembre del año pasado.
En lo que respecta a sus programas de defensa, espacio y seguridad, Boeing entregó 36 aeronaves en el último trimestre del año para elevar el total del curso a 112, en el que el modelo AH-64 Apache fue el más vendido.
Las cifras publicadas por la compañía este martes amplían la brecha con su principal competidor, Airbus, que entregó 766 aviones a clientes el año pasado, la mayor cantidad desde 2019.
Boeing publicará sus resultados para el último trimestre de 2024 y para el conjunto del año el próximo 28 de enero, después de triplicar sus pérdidas netas en los primeros nueve meses del curso, hasta los 7.968 millones de dólares, lo que supone un 260% más que los 2.212 millones de dólares del mismo periodo del año pasado.
