Junto al Banco Central Europeo (BCE), este mismo jueves, y a la Reserva Federal (Fed) -celebra reunión los días 17 y 18 de este mes-, otros bancos centrales también van a comunicar sus decisiones de tipos antes de que acabe el año. Ayer miércoles lo hizo el Banco de Canadá (recortó en 50 pb, hasta el 3,25%), y hoy acompaña al BCE el Banco Nacional de Suiza (SNB), que ha rebajado tasas en 50 puntos básicos, hasta el 0,5%.
"La presión inflacionaria subyacente ha disminuido nuevamente en este trimestre. La flexibilización de la política monetaria adoptada hoy por el SNB tiene en cuenta este desarrollo. El SNB continuará vigilando la situación de cerca y ajustará su política monetaria si es necesario para asegurar que la inflación se mantenga dentro del rango compatible con la estabilidad de precios a medio plazo", ha dicho el SNB en su comunicado .
Superada la reunión de la próxima semana de la Fed, para la cual se espera un recorte de 25 puntos básicos (especialmente después de que el IPC de EEUU salidera ayer en línea con lo previsto), llegará el turno del Banco de Inglaterra (BoE), que se pronuncia el jueves, 19 de diciembre.
"Aunque los mercados esperan tan pocos recortes de tipos de interés para el Banco de Inglaterra como para la Reserva Federal, las perspectivas económicas son algo diferentes entre las dos partes de la 'relación especial'", comenta Thozet.
"Las expectativas 'hawkish' para el BoE han llevado a una brecha histórica entre los tipos del euro y los de la libra esterlina - ahora son tan amplios como durante el mini drama presupuestario de Liz Truss. Aunque el considerable déficit británico exigirá una financiación con tipos reales elevados, la economía del Reino Unido sigue vinculada a la del Viejo Continente. Por ello, es probable que el Banco de Inglaterra siga los pasos del BCE, y no los de la Reserva Federal, en su ciclo de bajada de tipos, sobre todo si las esperanzas depositadas en el consumo para sostener el crecimiento económico resultan efímeras", indica el experto.
El mismo día que el Banco de Inglaterra, se pronuncia el Banco de Japón (BoJ), que en su anterior reunión de octubre mantuvo los tipos de interés sin cambios en 0,25% y señaló la necesidad de examinar de cerca los desarrollos económicos globales, destacando su enfoque en los riesgos para una frágil recuperación doméstica al decidir cuándo endurecer la política monetaria nuevamente.
El mercado espera una nueva pausa en los tipos por parte del BoJ en este último encuentro del año.
"A pesar del sólido desempeño económico de Japón en el tercer trimestre, el mercado parece cauteloso sobre la disposición del banco central a tomar medidas audaces en su política monetaria. Interpreto esto como un reflejo de los desafíos estructurales en la estrategia económica de Japón", indica Rania Gule, analista sénior en XS.com.