
¿Es posible invertir en el sector de la defensa de manera sostenible? La gestora Robeco, con amplia experiencia en este campo, ofrece varios consejos muy útiles para los que quieran comenzar a comprar este tipo de compañías.
El compromiso de la Unión Europea para rearmar Europa (ReArm Europe) implica aumentar el gasto militar en 800.000 millones de euros, lo que ha provocado un fuerte rally bursátil de la industria aeroespacial y de defensa.
"Aunque invertir en fabricantes de armas controvertidas sigue estando prohibido, en Robeco siempre ha sido posible invertir en empresas involucradas en las industrias de defensa convencionales y sus servicios de apoyo. Esto podría aumentar ahora", según afirman los especialistas en inversiones sostenibles y multi-activos de Robeco.
EQUILIBRAR RIESGOS Y RENDIMIENTOS
"Estamos tratando de conciliar una reticencia natural a invertir en defensa, debido a su asociación inherente con conflictos insostenibles y no deseados, con el hecho de que somos inversores multi-activos, y queremos equilibrar la compensación entre riesgo, rendimiento y sostenibilidad cuando se trata de gasto en defensa", dice Aliki Rouffiac, Gerente de Cartera de Robeco Sustainable Multi-Asset Solutions.
"A largo plazo, debemos posicionarnos para beneficiarnos de los cambios significativos en la política europea para aumentar el gasto en defensa. El plan ReArm Europe significa una nueva inversión masiva para salvaguardar la seguridad de la región", añade este experto
"Si es así, esperamos que el peso del subsector aeroespacial y de defensa crezca más allá del 2% de exposición actual en el Índice de Renta Variable Global, mientras que otras partes del mercado también se beneficiarán del incremento en el gasto", añade Aliki Rouffiac.
EMPRESAS DE DEFENSA EN CARTERAS TRADICIONALES
"Como inversor responsable, siempre hemos podido invertir en defensa para nuestras carteras de inversión tradicionales, y obviamente ahora se está volviendo más relevante", dice Carola van Lamoen, Jefa de Inversiones Sostenibles en Robeco.
"Nuestras estrategias tradicionales nos permiten invertir en la industria de defensa, excluyendo solo las armas controvertidas. En Robeco, reconocemos el cambio en el panorama geopolítico y la creciente responsabilidad de los gobiernos europeos en la defensa del continente. Este cambio también conlleva mayores inversiones en el sector de la defensa", añade.
"En Robeco, estamos comprometidos con la integración de los principios ESG, y equilibramos los objetivos de nuestros clientes de rentabilidad, riesgo y sostenibilidad, teniendo en cuenta sus metas y adaptando los resultados en consecuencia", relata Carola van Lamoen.
ARMAS EXCLUÍDAS
Robeco considera que las armas controvertidas son las municiones de racimo, las minas antipersona, el fósforo blanco y las municiones de uranio empobrecido, junto con las armas químicas, biológicas y nucleares. Casi todas están prohibidas por tratados internacionales. Estas forman parte de las exclusiones de Nivel Uno en Robeco y se aplican a toda la gama de inversiones, lo que hace que las empresas que las fabrican no sean elegibles para invertir.
Las exclusiones de Nivel Dos son utilizadas por las carteras personalizadas de inversión sostenible de Robeco y van más allá, prohibiendo específicamente a una empresa debido a actividades clasificadas como insostenibles. Desde una perspectiva de defensa, los contratistas militares son excluidos por encima de ciertos umbrales de ingresos.
"Nuestra gama de estrategias de inversión más sostenible no invierte en defensa porque no definimos las armas como una inversión sostenible", dice Van Lamoen. "En otras palabras: invertir en defensa puede ser responsable, pero no sostenible", concluye.
INVERSIÓN DIRECTA
También existen oportunidades de inversión en las industrias de apoyo no letales que respaldan a los ejércitos y su infraestructura. Así, hay oportunidades en la provisión de servicios de catering y las empresas relacionadas que suministran alimentos a las tropas.
Los inversores también pueden buscar proveedores de uniformes militares de alta gama, empresas de logística, tecnología de satélites o incluso bancos que ofrezcan préstamos a cualquiera de estas empresas.
La guerra moderna tampoco se limita al campo de batalla, como se vio cuando un equipo de hackers norcoreanos supuestamente robó más de 1.000 millones de dólares en criptomonedas. Esto abre oportunidades en ciberseguridad.
"Esto también respalda un enfoque de gestión activa, ya que va de la mano con nuestros principios de inversión sostenible, permitiendo la diferenciación entre las empresas que son invertibles y aquellas que realmente forman parte de nuestras políticas de exclusión", dice Rouffiac.
"Es más una evolución que una revolución. Los planes propuestos para aumentar el gasto en defensa aún deben ser ratificados por los gobiernos, y esto puede llevar tiempo. Además, podría haber un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania en el futuro, lo que disminuiría la urgencia. Esto significa que debemos mantenernos flexibles en nuestros enfoques y términos", concluye Aliki Rouffiac.