DWS no compra la postura 'hawkish' de la Fed: ve 3 recortes en los próximos 12 meses

La gestora de Deutsche Bank sobrepondera la renta variable europea frente a la estadounidense

ep archivo   businessman checking stock market data he using a mobile phone analysis economy data on
WITTHAYA PRASONGSIN - Archivo

Con el segundo semestre a la vuelta de la esquina, son cada vez más los inversores que se preguntan qué pasará en lo que resta de 2024. En lo que llevamos de año, la renta variable se ha comportado bastante bien, con la mayoría de grandes selectivos ofrecen rentabilidades que rondan el doble dígito, mientras que la renta fija sigue alicaída en estos meses. Todo ello en un contexto marcado por el desarrollo de los distintos conflictos geopolíticos abiertos, así como de las distintas citas electorales que se celebrarán en los próximos meses y, sobre todo, por lo que harán los grandes bancos centrales occidentales.

En este sentido, Mariano Arenillas, responsable para Iberia de DWS, ha indicado que prevé tres bajadas de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) de aquí a los próximos doce meses, así como por parte de la Reserva Federal (Fed). De hecho, en el caso del banco central estadounidense, la gestora de Deutsche Bank sigue esperando un primer recorte de las tasas oficiales en septiembre.

"Hemos empezado a ver una tendencia en los bancos centrales occidentales a normalizar los tipos de interés. No podemos hablar de políticas expansivas, pero sí de políticas menos restrictivas. Estamos en un entorno de restricción de la financiación y claramente el objetivo es que la tasa de tipos menos inflación siga siendo positiva", ha indicado Arenillas.

Tras su última reunión, celebrada entre el 11 y el 12 de junio, el banco central se mostró más 'hawkish' (duro) de lo previsto y redujo su previsión de recortes de los tipos de interés desde los tres hasta solo uno en 2024. Asimismo, el presidente Powell subrayó que la Fed necesitaría ver un "progreso real" de la inflación antes de empezar a suavizar la política monetaria. No obstante, los analistas consideran que la Reserva Federal está siendo demasiado cauta y, en general, siguen esperando dos recortes de los tipos de interés en lo que resta de año.

Arenillas justifica esta visión destacando que hay un incremento paulatino de la tasa de paro de EEUU que sugiere que la economía se está ralentizando, lo que apoyará las bajadas de tipos por parte de la Fed. "Hay más consenso sobre la debilidad macroeconómica, que empujará a recortar los tipos", subraya.

APUESTA POR LA BOLSA EUROPEA, A PESAR DE FRANCIA

En este escenario, el experto de DWS reitera que la gestora se mantiene "constructiva" en renta variable y ha mostrado su preferencia por las acciones europeas sobre las estadounidenses. En concreto, la gestora de Deutsche Bank mantiene un consejo 'neutral' sobre varios índices del Viejo Continente, al tiempo que 'sobrepondera' el Stoxx 600 e 'infrapondera' el S&P 500. "Nos sentimos más cómodos con acciones europeas", reconoce Arenillas.

Asimismo, el responsable de Iberia de DWS resta importancia a la volatilidad que se está observando en el mercado francés después del llamado electoral del presidente Emmanuel Macron, que convocó elecciones legislativas después de una abrumadora victoria de la ultraderecha liderada por Marine Le Pen en los últimos comicios europeos.

Según Arenillas, el efecto observado en los mercados no tiene que ver con esta hipotética victoria de la derecha radical francesa, sino con que "cuando el mercado no espera un dato o algo y surge ese evento, se genera la incertidumbre". "La incertidumbre de cuando surge algo que no nos esperamos, como estas elecciones. Posteriormente, la gente se da cuenta que el mundo no se acaba y la situación se normaliza", agrega.

Asimismo, el experto de DWS no ve preocupante la rebaja de rating a la deuda francesa por parte de S&P y opina que "no es necesariamente un tema que tenga un efecto negativo" sobre la deuda del país vecino. "Lo que sí, se está generando una menor estabilidad en el pais que lleva a las agencias de rating a curarse en salud. No nos parece que Francia vaya a entrar en crisis por esta situacion, pero si que despues de las elecciones volveremos a ver mejoras en el nivel de la prima de riesgo y en los 'credit default swaps'", afirma este experto.

En cuanto a Estados Unidos, Arenillas reconoce que la bolsa estadounidense está "cara", debido a que la ratio precio-beneficio (PER, por sus siglas en inglés) se encuentran en niveles demasiado altos. "Sin negar la fuerza y la disrupción que ha generado la inteligencia artificial (IA), pensamos que va a ser muy complicado que estas compañías a largo plazo sean capaces de mantener las tasas de crecimiento en los resultados", subraya el estratega de DWS. No obstante, Arenillas ha subrayado que "sin los '7 magníficos', la bolsa estadounidense no está tan cara".

Con todo, el experto de DWS recalca que "hay que tener tecnología" en las carteras y "diversificar ante posibles sustos" en el mercado, que pueden llegar, por ejemplo, de un potencial repunte de los precios del petróleo, que en los últimos meses han ayudado a que se modere la inflación. Otros posibles factores que pueden provocar algún susto en el mercado se encuentran los conflictos geopolíticos (aunque todavía no están teniendo efecto en las cotizaciones) o en la guerra comercial entre Occidente y China, en la que se ha escrito un nuevo capítulo con la imposición de aranceles a los vehículos eléctricos fabricados en el gigante asiático.

De igual modo, ha señalado que las altas rentabilidades observadas en la bolsa japonesa se deben a dos factores. En primer lugar, a la perspectiva de que, por fin, el Banco de Japón conseguirá provocar una tasa de inflación positiva después de "25 años de inflación inexistente". "Si hay inflacion, la economia crece y eso genera cierto optimismo", indica. Por otro lado, Arenillas destaca que la bolsa nipona se ha vuelto un buen 'proxy' de China, es decir, una forma de exponerse al crecimiento del gigante asiático debido a sus fuertes vínculos comerciales.

MAL AÑO PARA LA RENTA FIJA

Finalmente, Arenillas ha subrayado que este 2024 "no va a ser el año" de la renta fija, aunque esperaban que lo fuera tras su desempeño negativo desde 2022. No obstante, las últimas lecturas y las cambiantes expectativas en torno a la inflación han provocado que no termine de despegar.

En este sentido, el responsable de Iberia de DWS considera que las bajadas de tipos podrían estimular la demanda de renta fija, especialmente a largo plazo. De hecho, Arenillas señala que están observando un fuerte interés por la renta fija de corta duración por parte de los inversores minoristas.

Noticias Relacionadas
contador