Kamala Harris se ha dado un auténtico baño de masas esta semana durante la Convención Nacional Demócrata, en la que ha oficializado su candidatura a las elecciones de EEUU con el beneplácito del exmandatario Barack Obama, y de paso ha seguido recortando distancias con el teórico favorito de cara a los comicios, Donald Trump. Tras esta cita, los analistas de Oxford Economics han revisado a la baja el 55% de probabilidades de victoria que otorgaban al líder republicano, y ahora anticipan un empate técnico.
"Reducimos la probabilidad de que Trump gane del 55% al 50%. Por el contrario, las probabilidades de que la vicepresidenta Kamala Harris prevalezca ahora son del 50%, y la mejora se produce a través de una probabilidad modestamente mayor de control demócrata de la Casa Blanca y las dos cámaras del Congreso", señalan.
El evento sirvió también para que Harris mostrara las cartas con las que espera vencer en la carrera presidencial y que, según estos analistas, conducirían a mayores tasas de crecimiento económico y de inflación.
"La vicepresidenta Kamala Harris ha hecho pública la primera parte de su plan económico. En él, propone una expansión de los créditos fiscales, menores costes de medicamentos recetados e iniciativas de vivienda asequible. Consideramos este primer tramo de su agenda fiscal de forma aislada y estimamos que estas políticas impulsarían el nivel del PIB real hasta en un 0,8% en el medio plazo. Un crecimiento más fuerte va acompañado de inflación, que es 0,2 puntos más alta en relación con el escenario base", detallan.
La actual vicepresidenta del país tiene intención de ampliar "el Crédito Tributario por Hijos (CTC) para familias y el Crédito Tributario por Ingreso del Trabajo para trabajadores sin hijos, al tiempo que mantendría las mejoras a los subsidios de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio".
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"Entre sus propuestas del lado de la oferta para mejorar la asequibilidad de la vivienda, introduciría un incentivo fiscal para la construcción de viviendas iniciales, crearía un fondo de innovación de 40.000 millones de dólares para facilitar subvenciones a los gobiernos locales que diseñen planes para ampliar la oferta de viviendas y ampliaría los créditos fiscales existentes que fomentan la asequibilidad de la vivienda", añaden en Oxford.
Las propuestas de Harris también pueden cambiar la agenda republicana, lo que ha llevado a la firma británica a modificar su "forma de pensar sobre cómo un gobierno liderado por los republicanos abordaría los créditos fiscales a la energía limpia del IRA (Inflaction Reduction Act o Ley de Reducción de la Inflación)".
Anteriormente, la firma asumía que los republicanos derogarían los incentivos fiscales para vehículos y electricidad limpios si Trump controlara únicamente una cámara del Congreso y que "los legisladores republicanos eliminarían por completo todos los créditos fiscales a la energía limpia del IRA" si controlaran las dos.
"Ahora, asumimos que una victoria republicana solo deroga los créditos fiscales para vehículos limpios del IRA y deja intacto el resto de los créditos fiscales para energías limpias", destacan.
PREOCUPA UN CONTROL TOTAL DE LOS REPUBLICANOS
Con la carrera presidencial en EEUU más reñida que nunca, los analistas empiezan a aventurar cómo reaccionarían los mercados ante cada posible resultado, y en Julius Baer consideran que "es poco probable que el status quo de un gobierno dividido liderado por los demócratas mueva mucho los mercados", mientras que "el riesgo de expansión fiscal e incertidumbre política asociado con un barrido republicano es el principal escenario de riesgo".
"Una barrida de Trump en la que los republicanos ganen la presidencia y una mayoría en el Congreso, a lo que seguimos asignando una probabilidad del 45%, tiene el potencial de mover los mercados significativamente. Considerando una extensión de la Ley de Empleos y Reducción de Impuestos, la política fiscal sería aún más expansiva, mientras que la introducción de aranceles de base amplia y fiscalmente significativos tendría como objetivo compensar los menores ingresos por impuestos a la renta", anticipan.
Como resultado, probablemente se produciría "un mayor crecimiento pero también una mayor inflación, ya que los déficits presupuestarios aumentarían a territorio inexplorado y los mercados probablemente reaccionarían elevando los rendimientos de los bonos del Tesoro".
Sin embargo, la tendencia actual hace que los analistas se inclinen cada vez más hacia una ligera victoria demócrata, aunque lo reñido de la contienda hace probable que esta se decida por un pequeño número de Estados.
"Las encuestas realizadas en el período previo a la Convención Nacional Demócrata de esta semana en Chicago muestran que la vicepresidenta Kamala Harris no sólo tiene impulso sino también una ligera ventaja sobre Donald Trump a nivel nacional y en la mayoría de los estados clave en el campo de batalla. Las encuestas a nivel estatal muestran que Arizona, Michigan, Pensilvania y Wisconsin se inclinan por los demócratas por un margen de entre un 1,5% y un 4%", concluyen desde el banco.
De esta manera, "Trump solo necesitaría cambiar uno de los tres estados del 'muro azul' (Michigan, Pensilvania o Wisconsin) para ganar en noviembre, suponiendo que gane todos los estados donde las encuestas actualmente lo muestran por delante de la vicepresidenta Harris".
