Thyssenkrupp Steel Europe ha presentado las principales líneas de actuación para su estrategia industrial global como respuesta a la consolidación de los cambios estructurales y fundamentales en el mercado europeo del acero y en los mercados clave de clientes y de destino. Entre las medidas a tomar se encuentra eliminar alrededor de 5.000 puestos de trabajo hasta 2030 mediante ajustes en la producción y la administración, mientras que otro tramo de 6.000 puestos de trabajo se transferirán a proveedores de servicios externos o se eliminarán mediante la venta de actividades comerciales.
Asimismo, se reducirán los costes de personal una media del 10% en los próximos años, ajustándolos así a un nivel de "costes competitivo". En el marco de la reestructuración, el objetivo declarado sigue siendo evitar los despidos por razones operativas.
"Nos tomamos muy en serio nuestra responsabilidad y queremos crear perspectivas a largo plazo para el mayor número posible de nuestros empleados", ha señalado el director general Dennis Grimm . "Por ello, nos adaptaremos a las nuevas condiciones del mercado mediante ajustes de capacidad y reducciones de costes específicos. Para prepararnos para el futuro, es necesario optimizar y racionalizar en profundidad nuestra red de producción y nuestros procesos".
El grupo industrial alemán también se ha referido a que el exceso de capacidad y el consiguiente aumento de las importaciones baratas, sobre todo de Asia, están poniendo cada vez más a prueba la competitividad. "Además, se necesitan medidas urgentes para mejorar la productividad y la eficiencia operativa de thyssenkrupp Steel y alcanzar un nivel de costes competitivo".
Por ello, el documento de puntos clave de Thyssenkrupp Steel prevé reducir la capacidad de producción de los 11,5 millones de toneladas actuales a un nivel de producción objetivo de entre 8,7 y 9 millones de toneladas en función de las condiciones del mercado, adaptando así la capacidad a las expectativas futuras del mercado.
"El objetivo principal es vender las acciones de HKM. Si la venta no es posible, thyssenkrupp Steel mantendrá conversaciones con los demás accionistas sobre escenarios de cierre mutuamente aceptables. Además, se cerrará la planta de procesamiento en Kreuztal-Eichen", ha añadido la empresa.
TRANSFORMACIÓN VERDE
Thyssenkrupp Steel sigue apostando por la transformación ecológica y la producción de acero sin emisiones de carbono. La empresa sigue firme en su intención de completar la planta de reducción directa que ya está en construcción, al tiempo que mantiene conversaciones constructivas con las partes interesadas responsables para garantizar la viabilidad económica de este gran proyecto de inversión en las cambiantes condiciones marco.
Hasta 2030, los dos altos hornos 8 y 9 de Duisburg serán sustituidos por la planta de reducción directa y los dos innovadores hornos de fusión previstos con una capacidad total de despacho de 2,2 millones de toneladas métricas al año. "En el futuro, por ejemplo, se podría sustituir otro alto horno por un moderno horno de arco eléctrico. Sin embargo, la decisión al respecto solo se tomará en una fecha posterior y en función de las condiciones económicas, tecnológicas y políticas vigentes en ese momento".
Paralelamente a la implementación del concepto, Thyssenkrupp AG continúa con el proceso de independencia del negocio siderúrgico. En un primer paso, ya se ha vendido el 20% de las acciones de Thyssenkrupp Steel al grupo checo EP con el objetivo de aumentar la participación al 50%.
"Con la reestructuración estratégica y a largo plazo, lograremos que thyssenkrupp Steel esté preparada para el futuro a largo plazo", ha afirmado Marie Jaroni, directora de transformación de Thyssenkrupp Steel .
"En términos de eficiencia operativa y rentabilidad, aún tenemos que recuperar terreno en áreas competitivas clave. Necesitamos cerrar estas brechas si queremos mirar hacia un futuro positivo. Esto es aún más importante, porque queremos impulsar sistemáticamente la transformación verde. Es indispensable y reemplazará al modelo de negocio anterior basado en el carbón a largo plazo. La implementación del concepto presentado hoy será decisiva para nuestra competitividad y, por lo tanto, para nuestro futuro", ha concluido.