¿Qué casas de apuestas cotizan en bolsa?

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Balón de fútbolS. Alexander Gilmour (Flickr)

En España se regularizó el juego online en 2012, un poco tarde con respecto a la mayoría de países del entorno, que desde hace varios años cuentan con una legislación que permite no solo controlar las prácticas de estas casas de apuestas, sino también recaudar impuestos, algo totalmente necesario en una época en donde cada vez se recauda menos.

Desde entonces, el número de casas de apuestas que han abierto en España se ha incrementado bastante y aunque esto no implica que a todas les vaya bien, sí que se puede decir que su crecimiento general ha ido de la mano de la popularidad del juego online en nuestro país.

- Casas de apuestas que cotizan en bolsa
- ¿Es aconsejable invertir en casas de apuestas?
- Legislación al respecto

CASAS DE APUESTAS QUE COTIZAN EN BOLSA

Los últimos años en el mundo de las apuestas deportivas han servido para reorganizar el mercado. En un sistema tan competitivo como el de las apuestas y el juego online se tiende a disminuir el número de competidores a medida que pasan los años. No todos pueden triunfar, no todos pueden crecer, y al final, los grandes se suelen comer a los chicos. Y esto es lo que ha pasado. De un tiempo a esta parte se han producido varias fusiones que se pueden considerar naturales y que, en la mayoría de los casos, han venido bien a las dos partes. La primera fue la de Ladbrokes (Sportium) con Gala Coral, comprada por 50 millones de libras. Después PaddyPower y Betfair se unieron, facturando unos 1.500 millones de euros en 2015 de manera conjunta. Además, GVC (Bwin) y William Hill compraron Sportingbet también de forma conjunta con el fin de repartirse los posibles beneficios. No se fusionaron, pero actuaron de la mano, en un movimiento que se espera positivo en un futuro.

Así, se puede ver como entre las casas de apuestas deportivas con licencia en España, la gran mayoría operan en bolsa: Bwin, William Hill, Betfair, Sportium…Etc, llegando incluso a fusionarse entre ellas aunque sigan respetando sus propias marcas. Y eso sin contar la mayor operación de todas, ya que GVC (Bwin) acaba de comprar Ladbrokes (Sportium) por unos 4.500 millones de euros, lo que es la mayor fusión de la historia de las casas de apuestas.

¿ES ACONSEJABLE INVERTIR EN CASAS DE APUESTAS?

Youssef Rahoui (Flickr)

No se puede responder a esta pregunta de forma general. Ningún mercado es tan estable como para poder decir un si un no y las casas de apuestas no son una excepción. Hay bookies a las que les va muy bien y hay bookies a las que les podría ir mejor. Se pueden poner ejemplos de ambos casos.

Así, si se habla de GVC hay que decir que en el último año sus acciones se han revalorizado más de un 45% ya que el año pasado costaban unas 6 libras y este año, después de la compra de Ladbrokes han superado las 10 libras. Estos números marcan máximos históricos, lo que lleva a la gran mayoría de analistas a aconsejar la compra de acciones de GVC.

En el otro lado de la balanza, se observa como el precio de la acción de Paddy Power Betfair ‘solo’ ha crecido un 3,80% en el último año o como Codere, la multinacional española, arrojó un beneficio de 8,3 millones de euros en los primeros nueve meses de 2017 cuando en el mismo periodo de 2016 sufrieron pérdidas de 1.129 millones de euros debido a su restructuración financiera.

LEGISLACIÓN AL RESPECTO

Una cosa que hay que tener en cuenta a la hora de invertir o no en una casa de apuestas es la legislación. Aunque son empresas multinacionales, dependen de la legislación de cada país en relación a las apuestas deportivas. En España, por ejemplo, la oposición está intentando que se tomen medidas contra la ludopatía online, algo que de momento no se tiene muy en cuenta en la ley al ser un fenómeno relativamente reciente. De hecho, algunos grupos solicitan que se declare como enfermedad, lo que podría suponer serias restricciones publicitarias que, obviamente, perjudicarían notablemente a las cuentas de las empresas.

Además, es necesario tener indicar que los países cada vez van a gravar mucho más las apuestas online, debido a la bajada de recaudación de las apuestas tradicionales, normalmente dirigidas por el Estado. En España, por ejemplo, los ingresos de La Quiniela han disminuido notablemente, por lo que se supone que esto provocará un aumento de la fiscalidad en las apuestas deportivas que también puede perjudicar bastante a las bookies.

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