El sector del juego está en crecimiento constante y se ha convertido en una importante fuente de ingresos para las arcas del estado. En términos globales, el capital proveniente del juego equivale aproximadamente al 3,5% del PIB español, lo que le sitúa por delante de actividades como la agricultura, la ganadería y la pesca. Además, el sector proporciona empleo directo a 80.000 personas.
La buena salud del juego se puede apreciar en los datos del último año. Solo el juego online movió en 2018 cerca de 17.400 millones de euros, con un beneficio neto para las operadoras de 699 millones. Las cifras representan un incremento de un 25% respecto a 2017, lo que confirma el empuje imparable que experimenta este ámbito de negocio.
Y, ¿quién es el responsable de este avance? Hoy por hoy, el principal motor de la industria del juego se encuentra en las apuestas deportivas, que facturaron el pasado año nada menos que 365 millones de euros en España. Una de las empresas más activas fue Betway, que con sus apuestas de fútbol en línea obtuvo el apoyo de miles de internautas.
Al margen del campo de las apuestas, también aumentaron notablemente los juegos de casino virtuales y el póker online. La facturación de los casinos pasó de 170 a cerca de 240 millones de euros, gracias en buena parte a las máquinas tragaperras. Por su parte, el póker aumentó su cifra de negocio en 22 millones de euros.
APUESTAS EN DIRECTO
El éxito de las apuestas deportivas en 2018 tuvo una relación directa con el Mundial de Fútbol de Rusia. Es un fenómeno que se repite con frecuencia: cada vez que hay competiciones de máximo nivel, las apuestas deportivas se incrementan.
Pero el empuje de esta actividad de ocio no es tan solo una moda pasajera. Las apuestas online se están afianzando entre la población gracias a las nuevas opciones de juego. Hablamos principalmente de las apuestas en directo, que han añadido interés a una actividad ya de por sí excitante. Las nuevas modalidades de apuestas permiten fijar posiciones mientras se está desarrollando un encuentro. En el caso del fútbol, los abonados pueden apostar por el resultado, el número de faltas, penaltis, expulsiones, córneres y un sinfín de posibilidades.
Otro factor añadido es la diversidad de deportes. Aunque el fútbol es el rey de las apuestas, también hay otras competiciones que acaparan la atención de los internautas, como el tenis, las carreras de caballos, el baloncesto o las competiciones de motor.
MÁS PUBLICIDAD
El auge de las apuestas deportivas online tiene mucho que ver con otro hecho determinante: el aumento de la inversión en publicidad por parte de las operadoras. Los anuncios en televisión sobre juego son una constante, así como el uso de caras conocidas como elemento reclamo. El incrememto de la inversión en publicidad ha propiciado un despegue en el número de abonados. A finales de 2018, la cifra de usuarios activos en las casas de apuestas online superaba ligeramente los 3 millones, 700.000 más que en 2017.