Abogada que atropelló a tres policías en su intento de huida pasará entre 8 y 12 años en la cárcel

Al ser detenida, ilesa y con signos de haber bebido más de lo permitido para ponerse al volante de un vehículo, dijo muy seriamente a los policías que la escoltaban hasta una patrulla: “Ustedes me tratan como a una delincuente y esto nunca se los voy a perdonar”. Luego lloró. La abogada Ana Rodríguez pasará, por su irresponsable acción, entre 8 y 12 años en la cárcel, y ella lo sabe más que nadie, pues conoce de leyes. Su destino se decidirá hoy o durante los siguientes días.

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El dosaje etílico se le practicó a Ana Isabel Rodríguez Salazar 5 horas después del incidente, por lo que los médicos legistas sospechan que la abogada no solo estaba borracha sino borrachísima.

Ana Isabel Rodríguez Salazar, que nació en Noche Buena en 1980, en el departamento de La Libertad, según su documento de identidad, en el que se detalla que es casada, en la mañana del jueves, pidió disculpas públicas. “Pido disculpas públicas por mi comportamiento”, dijo la abogada a su salida de la comisaría de San Isidro, a la que asistió para dar su versión de los hechos, que fueron grabados por ciudadanos con smartphones, y que ahora circula por la web.

Ella intentaba ocultar su rostro de los flashes y las cámaras que transmitían en vivo su llegada y salida de la estación policial, para luego ser conducida a la fiscalía.

Completamente sobria en esta ocasión y no con 1,8 gramos de alcohol por litro en la sangre, tal y como lo determinó el examen de alcoholemia que le practicaron a la abogada luego de que intentara huir y atropellara a los policías.

Para ser más precisos, el dosaje etílico se le practicó a Ana Isabel Rodríguez Salazar 5 horas después del incidente, por lo que los médicos legistas sospechan que la abogada no solo estaba borracha sino borrachísima y al volante de un moderno Nissan blanco de placa D9B-361. “Es probable que haya superado los dos gramos de alcohol al momento del atropello", dijo Máximo Ramírez, director de Defensa Legal de la PNP.

El insólito hecho de prepotencia sucedió en una de las avenidas más congestionadas de Lima, la Javier Prado, al promediar las cuatro de la tarde del pasado miércoles 17 de junio, el mismo día que el delantero chileno Arturo Vidal se estrelló con su Ferrari por pasarse de copas; hora en la que el tránsito por esta vía empieza a congestionarse e impacientar a los conductores, que suelen, en estos casos, optar por las vías alternas para llegar más pronto a casa.

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