La cantante ha vuelto a reivindicarse a favor deClinton realizando un concierto sorpresa, improvisado y de unos 45 minutos de duración
Después de demostrar Madonna lo fiel seguidora de Hillary Clinton que es al ofrecerse a realizar una felación a cualquiera que votara a la candidata a la presidencia de los EEUU, la cantante ha vuelto a reivindicarse a favor de la misma realizando un concierto sorpresa, improvisado y de unos 45 minutos de duración. Avisó con media hora de antelación en su red social de Instagram, y quizá por primera vez en su carrera, apareció puntual y en un lugar normalmente reservado para artistas callejeros y turistas que se toman un respiro: la fuente de Washington Square. La cantante intentó convencer a todos los asistentes de su concierto a votar a la candidata a presidenta del gobierno de los EEUU con unas palabras que han generado mucha polémica.
"Mantengamos este país grande, como es. No necesitamos a nadie que le devuelva la grandeza", aseguró junto a su hijo David como guitarrista, Monte Pittman y apenas dos centenares de personas. La Madonna más política supo dar también a su público un poco de la Madonna de toda la vida dedicando guiños a la comunidad homosexual, que era la que estaba inicialmente convocada para un acto de convencional de apoyo a la candidata demócrata. “Ahora atiendo al público de atrás. Soy activa y soy pasiva, pero no puedo hacer las dos cosas a la vez”, bromeó.
Sus fans ya tenían otra candidata y gritaban “Madonna for president".
Madonna, declarada fan de Barack Obama prosiguió: "Espero que después de esto, me inviten a la Casa Blanca, ya que lo intenté con Obama y nunca sucedió”. Y, así, fue cantando temas en acústico sin importarle ni su aspecto, muy poco favorecedor, ni su entonación, recoge El País. Hoy estaba a otra cosa. Cambió su Express Yourself por "Express herself", para dedicársela a Clinton. Su Don't Tell Me se convirtió en “Don't tell us”, como mensaje para Trump y ofreció dos versiones: Imagine, de John Lennon, y If I Had a Hammer, de Peter, Paul and Mary, que trenzó con su Rebel Heart, ofreciendo musicalmente el único momento inédito impagable para los fans que cancelaron su apretada agenda neoyorquina para abrir paso a su icono.
Con tanto entusiasmo se tropezó y casi cayó. "Estoy segura de que Donald Trump es el responsable de estos agujeros, pero no se puede derribar a una gran mujer", reaccionó, pero poco a poco parecía sentirse más como en casa y fue dejando al público que se acercara hasta tocarla fue cuando disparó: "Si no queréis ser el hazmerreír de todo el planeta, si queréis salvar este país, votad por Hillary Rodam Clinton". Pero sus fans ya tenían otra candidata y gritaban “Madonna for president".