Por qué el mercado salva a Repsol con su promesa de dividendo... y a Telefónica, no
La petrolera redujo su posición de caja durante el trimestre del inicio del impacto del Covid
Repsol y Telefónica viven momentos similares y, al mismo tiempo antagónicos. Sus negocios difieren pero son dos de los grandes nombres del Ibex que han defendido contra viento y marea su dividendo, a pesar de la tormenta económica provocada por el coronavirus. Y ambas presentan resultados a lo largo de la presente semana.
La primera ha sido Repsol que, a pesar de anunciar pérdidas de 487 millones en el primer trimestre del año, se apuntó un despegue en bolsa este martes de más del 13%, hasta alcanzar los 8,68 euros la acción y regresar así a niveles previos a la declaración del estado de alarma.
Repsol despega después de lanzar a los inversores un mensaje de respaldo a su dividendo, a pesar de esos números rojos y de asumir que el sector atraviesa un momento complejo, por el frenazo a la producción y la caída de los precios del crudo. La petrolera mantiene el objetivo de abonar con cargo a 2020 una retribución de 1 euro por acción. En julio, pagará 0,55 euros por título, bajo la fórmula de ‘scrip dividend’.
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Además, la compañía recalcó este martes en su conferencia de resultados con inversores que tiene intención de rebajar su deuda neta al concluir el ejercicio. Deuda que, en el primer trimestre, se ha incrementado, porque al cierre de marzo alcanzó los 4.478 millones de euros, frente a los 4.220 millones del 31 de diciembre de 2019.
POSICIÓN DE CAJA
Lo que sí ha reducido es su posición de liquidez. Al concluir el trimestre, se situó en 3.434 millones de euros, según el informe remitido por Repsol a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Hace un año, era de 4.829 millones.
La petrolera también indica que, en este primer trimestre, afectado al menos en dos semanas por la pandemia del Covid-19, el flujo de caja de las operaciones ascendió a 596 millones de euros, comparados con los 1.161 millones en el mismo periodo de 2019. Sólo en cuanto al flujo de caja libre ha sido de 389 millones (593 hace un año). Argumenta a la CNMV que ha recibido la “devolución del impuesto sobre beneficios de años anteriores” y que esa caja ha sido suficiente para "cubrir las inversiones netas, el pago de intereses y los dividendos del periodo”.
TELEFÓNICA Y EL CALENDARIO DE DESINVERSIONES
En este contexto complejo, Repsol ha convencido a los inversores tras presentar resultados y, este jueves, le tocará a Telefónica. En el caso de la operadora, tiene comprometido el pago de 0,4 euros por acción. La mitad, la abonará en diciembre de este año y, el resto, en junio de 2021.
De momento, su acción no despega al mismo ritmo que la de Repsol, aunque sí ha dejado atrás la caída por debajo de los 4 euros, los 3,6 que tocó a mediados de marzo. La compañía presidida por José María Álvarez-Pallete encara sus resultados a casi 4,5 euros el título y con la duda de si aclarará sus planes de desinversión. Por un lado, cómo avanzan sus negociaciones para unir su negocio en el Reino Unido (O2) con el de Liberty Global. También, si hay avances en los mercados que, a diferencia del anterior, no consideraba estratégicos, como son todas sus operaciones en América Latina, salvo Brasil.
