MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
La Fundación RACE ha lamentado el incremento de fallecidos en las carreteras españolas durante 2022, según las cifras provisionales publicadas por la Dirección General de Tráfico (DGT) y ha calificado como "imprescindible analizar pormenorizadamente y tomar medidas urgentes consensuadas" entre las organizaciones que forman parte del sector de la movilidad y la seguridad vial para reducir estas cifras.
Durante 2022 pedieron la vida en las carreteras un total de 1.145 personas, lo que supone un aumento del 14% respecto al año anterior (1.004 fallecidos) y un 4% respecto a 2019, año previo a la pandemia (1.098 fallecidos). Del total de fallecidos en el pasado ejercicio, 833 murieron en carreteras convencionales (73% del total), lo que supone un aumento del 15% respecto al año anterior (723).
Ante estos datos, la Fundación RACE considera que "la falta de mantenimiento y la escasa inversión en este tipo de infraestructuras contrasta con el incremento impositivo permanente que sufren los automovilistas, en los combustibles y peajes, principalmente".
Además, ha señalado que "preocupan" los datos de siniestralidad por las salidas de vía, causantes del 42% de fallecimientos, dato que sigue en aumento respecto a años anteriores. Asimismo, ve "alarmantes" los atropellos de peatones en carretera, donde se ha detectado, entre otras causas, que sólo 8 de los 126 atropellados (6%) llevaba una prenda reflectante; que 142 víctimas que viajaban en turismo y furgoneta (25%) no llevaban el cinturón de seguridad en el momento del accidente; y que 9 ciclistas y 5 motoristas no llevaban casco.
En este sentido, ha defendido la importancia de activar acciones efectivas de formación, información y concienciación para los automovilistas, motoristas y usuarios de la vía sobre las consecuencias de la no utilización de los elementos de seguridad, y del incumplimiento de las normas de movilidad y seguridad vial.
Incrementar la inversión en vías convencionales, potenciar el uso de las autovías y autopistas, apostar por la formación y concienciación de los automovilistas, e incentivar la modernización del parque automovilístico, cuya media de edad es de 13,5 años, a juicio de la Fundación RACE, son cuatro pilares fundamentales para reducir la siniestralidad vial en las carreteras.