En momentos de crisis es donde los grandes se crecen, siendo esto el puro instinto de evolución
Como todo en la vida, no son los hechos "en sí" de un acontecimiento sino cómo te lo tomes lo que determinará tu forma de ser. Y partiendo de ese punto de vista en el momento actual, nos encontramos ante un acontecimiento de crisis mundial llamado coronavirus que para muchos supondrá simplemente eso, una crisis, pero para otros un cambio a mejor para salir más reforzados de ello.
Según la forma de tomarnos las cosas podemos clasificar a la sociedad en dos grupos: los que vinieron a llorar y los que vinimos a vender pañuelos.
Esta frase esconde una filosofía de vida muy potente, de que en momentos de crisis es donde los grandes se crecen, siendo esto el puro instinto de evolución. Aunque vivamos en una sociedad donde esté de moda llorar y quejarnos de que la culpa siempre es ajena, como así predominan en todos los debates televisivos donde la popularidad parece ir de la mano de la mediocridad, pudiendo ver niños llorones quejarse de todo cuando ya peinan canas...
Como supondrá el lector que me conozca un poco, afortunadamente no suelo caer bien en esos ambientes donde predomina el quejarse del mundo sin hacer nada para el cambio. Precisamente, el poder aprender de todos los errores y ser conscientes que nada ni nadie va a hacer más por nosotros que nosotros mismos, fue lo que me ayudó tanto en esta vida a conseguir las metas profesionales y personales propuestas.
Por dicha razón veamos qué lecciones financieras nos deja el coronavirus para que podamos aplicar a nuestras vidas, algunas de ellas lecciones transmitidas en mis cinco libros sobre Educación Financiera y finanzas que ahora cobran más sentido.
1º No dependas de un salario: Siempre destaqué que el mayor limitador de riqueza que existe es el salario. Pues implica que la capacidad creativa, de conocimiento, de esfuerzo del empleado estará limitada, tendrá un techo llamado "salario" que cuantifica lo que vale una persona al mes. Independientemente de que esa persona mejorara durante años y su valor actual sea varias veces superior. Ahora mismo, ante el coronavirus, vemos cómo el quedarnos en casa para muchas personas supone no poder acudir a tu puesto de trabajo y peligra ese salario. Por no decir también que aquellas empresas que no puedan vender suficiente para mantener su ritmo de ingresos acabarán eliminando salarios. Suponiendo todo ello que un salario jamás puede ser nuestra única fuente de ingresos. Hay que generar diferentes vías de ingreso, algo habitual en personas que progresan financieramente de forma exponencial y que al cabo de un tiempo acaban entrando en el grupo de los "ricos". ¡Aquí tienes la razón!
2º Aprende a crear dinero desde Internet: Una de las lecciones que más destaqué a lo largo de estos años en mis intervenciones televisivas fue el entender la capacidad que todos tenemos de poder generar ingresos por Internet. Existen múltiples formas de crear esos ingresos de una manera incluso gratuita. Actualmente, ante las semanas de quedarnos en casa por el coronavirus, también muchas personas se ven limitadas a no poder tener ingresos. Algo que aquellos que llevamos desde años desarrollando a nivel profesional con las inversiones y operando en Bolsa no tenemos ningún cambio en esta situación. Pues allí donde tengas Internet siempre tendrás forma de obtener ingresos, si sabes cómo.
3º No busques trabajo, crea negocios: Uno de los grandes virus que tenemos en nuestra sociedad es nuestro obsoleto sistema educativo que forma esclavos del sector público y privado. Metes a un niño libre con 3 años en una escuela y lo sacas con lavado de cerebro 20 años después entendiendo que debe ser el sirviente perfecto de alguien. Sinceramente me parece lamentable que esa forma de pensar sea del 90% de la población, entendemos por tanto que el otro 10% tiene la mayor parte de la riqueza. Actualmente con el coronavirus tenemos un frenazo económico muy fuerte, que posteriormente se podrá traducir en recesión económica. Estos cambios en los ciclos económicos de los países provocan oleadas de despidos masivos para aquellos que dependen de un trabajo, y en donde ya os puedo adelantar ese millón de personas que irá al paro en los próximos meses analizando la situación económica futura. Por ello, aprendamos a no pedir trabajo, sino a crear nuestros propios negocios. Seremos más independientes, ágiles a los cambios y tendremos mayor satisfacción personal de que nuestro esfuerzo quede en nosotros mismos.
¡Aprendamos estas lecciones financieras que nos aporta el coronavirus!
Y si por su cabeza están pasando ahora mil y unas excusas con famosas coletillas del estilo "es que..." para no hacerlo, no se preocupe: ¡Tendré pañuelos para sus lloros!
En cambio si pertenece a mi grupo, sepa que comerse el mundo no engorda: ¡Buen provecho!
Alberto Chan (Twitter: @aneiroschan)
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