Gracias al rápido aumento de la adopción de energías renovables y los vehículos eléctricos
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) acaba de hacer unas nuevas predicciones que son música para los oídos de los ecologistas. La organización ha adelantado sus previsiones y afirma que el uso de los tres principales combustibles fósiles (petróleo, gas y carbón) empezará a disminuir antes de 2030, gracias al rápido aumento de la adopción de energías renovables y los vehículos eléctricos.
También señaló que China está cambiando las cosas, pasando de la industria pesada a sectores que consumen menos energía, como los servicios. Y teniendo en cuenta el enorme apetito de China por el petróleo y el gas en la última década, esto es algo importante.
Eso sí, si dejamos de lado los combustibles fósiles, corremos el riesgo de que las costosas operaciones de los gigantes del petróleo y el gas se conviertan en "activos bloqueados", es decir, en un lastre financiero. Pero seamos realistas: el mundo no puede abandonar el consumo de petroleo de golpe, así que, por ahora, va a ser menos "pisar el freno" y más "soltar el acelerador". Al fin y al cabo, si escatimamos demasiado en combustibles fósiles, podríamos sufrir problemas energéticos y subidas de precios. Y no hay que olvidar que muchos peces gordos del petróleo son también actores clave de la transición ecológica, así que tampoco es una pérdida total para ellos.
Pero no todo va sobre ruedas, dado que los adeptos del petróleo están ganando mas adeptos y está haciendo que la vida ecológica sea un poco más difícil, sobre todo con el aumento del coste de la vida. Y no son sólo palabras: El fondo Strive Asset Management, que está nadando a contracorriente de las preocupaciones de los activistas y de la ola verde, ya ha conseguido acumular más de mil millones de dólares en activos. Así que no demos por sentado que el camino hacia el pico de la demanda de petróleo va a ser fácil.