CaixaBank-Bankia: vuelco en el sector financiero español (1)
Con la fusión el oligopolio bancario que existe en España se fortalece, si cabe, aún más
Después que el Estado no haya conseguido llevar a cabo con éxito la estrategia inicial de ir reduciendo su participación mayoritaria en Bankia con ventas progresivas al sector privado y tras múltiples quinielas, como por ejemplo la que apostaba por una fusión de Bankia con el Banco Sabadell, finalmente hace pocos días llegaba la imponente noticia de la probable fusión de CaixaBank y Bankia, en conversaciones muy avanzadas, aunque no definitivas, y con la ministra Calviño al corriente de todo ello.
Y digo que la noticia impone porque tal y como podemos ver en la tabla adjunta, el sistema financiero español da un vuelco espectacular con la nueva entidad liderando claramente el mercado doméstico por activos dejando muy lejos al segundo y tercer banco español (BBVA y Santander) y a una distancia inalcanzable al cuarto banco (Sabadell). Que dicho monetariamente significa que BBVA tendría casi 200.000 millones de euros menos de activos que CaixabankBankia, que Santander estaría a más de 200.000 millones de euros de distancia y que el Sabadell solo representaría un tercio del volumen de activos de la nueva entidad. ¡Y eso siendo el Sabadell el cuarto banco español!
Iré analizando con más detalle en esta serie de artículos sobre la fusión, las bondades y lo cuestionable de esta operación, pero lanzo una primera consideración. España ya era uno de los países más bancarizados del mundo con un oligopolio bancario de una ascendencia extrema sobre los diferentes gobiernos que se han ido sucediendo en los últimos años, de izquierdas o de derechas. Con la fusión este oligopolio, si cabe, se fortalece aún más y por consiguiente la fuerza de los usuarios del sistema bancario español se debilita.
Algunos me podrán cuestionar esta tesis diciendo: “Los mercados acogieron con entusiasmo esta fusión, con sendas subidas intensas en bolsa de las acciones de CaixaBank y de Bankia, y por consiguiente es una buena operación para el sector”. A mi entender, y esperando un prolongado periodo de bajos tipos de interés en Europa con márgenes de intermediación bancarios cada vez más reducidos, claro que la fusión genera musculo a las dos entidades, sobre todo a Bankia, para navegar en este entorno adverso, pero eso es a cambio de un control cada vez mayor en cada vez menos manos del mercado bancario español, y eso en términos generales no es positivo para el usuario de banca.
Robert Casajuana i Alujas ( @CasajuanaRobert )
Socio Economista SLM ( www.slm-afi.es )
Profesor y Director Académico de ISEFi ( www.isefi.es )