La tecnología ha cambiado la forma en que las personas interactuan y se comunican entre ellas, llegando a generarles graves rpoblemas
La sociedad hipercomunicada en que vivimos hoy en día, tiene múltiples ventajas y avances que han ayudado a mejorar el día a día de millones de personas. Pero este avance trae consigo algunos problemas como la dependencia de la tecnología por parte de algunas personas. Con motivo de la celebración del 'Día Internacional del Móvil' (3 de abril), repasamos algunos de los síntomas claros de dependencia del móvil.
Los avances tecnológicos, a veces, generan más problemas que ayudas. Los teléfonos móviles han supuesto una auténtica revolución pero la adición a estos dispositivos supone, cada vez, un reto a superar por parte de la sociedad. Los usuarios con un perfil más activo de estas tecnologías son los jóvenes de entre 18 y 24 años, donde la media de horas diarias asciende a 6,8, en contraposición a los mayores de 55 años cuya media de uso es de 3 horas al día. Además, en cuanto al uso por género, las mujeres utilizan el móvil una media de 42 minutos más que los hombres.
A pesar de que los españoles dedican cada vez más tiempo a utilizar sus teléfonos móviles y de que en España la penetración de estos dispositivos se sitúa en el 88% (sólo superado por Singapur --92%--), tan sólo un 17,7% se considera adicto a ellos, aunque tres cuartas partes de la población española asegura que no podría vivir sin el móvil. El porcentaje de adictos sube 13,5 puntos, hasta el 31,2%, en el caso de los jóvenes de entre 18 y 24 años pero baja hasta el 10,2% en el caso de los mayores de 55 años. Además, la diferencia entre hombres y mujeres apenas llega a un punto porcentual, considerándose más adictas ellas (18,1%) que ellos (17,3%).
Los millennials más jóvenes, aquellos nacidos después de 1990 y considerados nativos digitales, afirman utilizar su smartphone una media diaria de 6 horas y 48 minutos, superando en casi cuatro horas a los nacidos entre 1951 y 1961, que se sitúan como los que menos uso dan al móvil, con un consumo de unas 3 horas al día.
Estas son algunas de las claves para detectar la dependencia o no de los smartphones:
1. NECESIDAD DE TENER EL MÓVIL CERCA
La preocupación por no tener el smartphone es uno de los síntomas más claros. Los adictos pueden tener miedo a la incomunicación e incluso necesitarlo como único apoyo posible para interactuar y comunicarse con otras personas.
2. CONSULTAS CONTINUAS
Junto a llevar al móvil encima a todos sitios, otro síntoma claro es de consultar de forma continuada el estado del dispositivo: ver si tiene baterías, si hay alguna notificación pendiente, si tiene sonido o está en silencio,...
3. LA VIBRACIÓN FANTASMA
La llamada 'vibración fantasma' por los expertos resume la sensación de una persona de que su móvil ha vibrado o sonado cuando en realidad no ha pasado nada. Denota una preocupación importante y un grado de adicción elevado.
4. USAR EL MÓVIL EN CUALQUIER LUGAR
Seguramente uno de los ataques más frecuentes a estas tecnologías es que, a veces, separan a las personas más de lo que las une. Utilizar el smartphone en reuniones sociales es un síntoma de desconexión del mundo físico, sustituyéndolo por la necesidad de estar conectado al mundo virtual.