Cambiar de compañía de teléfono, una pesadilla para uno de cada cuatro hogares
El sector de las telecomunicaciones es el que más portabilidades registró en 2017, seguido del de la electricidad y el del gas natural
Las portabilidades para cambiar de compañía de teléfono o Internet fijo son una auténtica pesadilla para uno de cada cuatro hogares. Así lo confirma la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que acaba de presentar el último Panel de Hogares con los datos de 2017, que revela además que el sector de las telecomunicaciones es el que más cambios de compañías registró el pasado año, seguido del de la electricidad y el del gas natural.
Sobre cómo fue el proceso de cambio de compañía, la CNMC señala que los usuarios consultados aseguraron que fue algo más complicado cambiarse de compañía eléctrica o de gas de lo que lo era en 2016. Aunque los grandes problemas surgieron en los cambios de compañía telefónica. Hubo más clientes que encontraron difícil hacer portabilidades en este sector que en el de servicios energéticos, de forma que "aproximadamente un 24% de los que se cambiaron de compañía de banda ancha fija y/o de telefonía fija ha declarado que el cambio fue difícil o muy difícil", señala el Panel.
Un 25% se cambió de compañía por la insatisfacción con la calidad del servicio de Internet
Aunque la razón, en muchos casos y pese a las dificultades, bien merecía estos dolores de cabeza. Y es que la mayoría de los clientes han reconocido que el objetivo era contratar un servicio más barato para ahorrar a final de mes. En el caso del sector de las telecomunicaciones, 6 de cada 10 clientes justificaron el cambio de compañía de teléfono fijo por este motivo, mientras que entre los que cambiaron de operador de Internet fijo uno de cada cinco han asegurado que optaron por la portabilidad para aumentar la velocidad de la conexión y un 25% ha señalado que fue por la insatisfacción con la calidad del servicio que tenía.
Por su parte, abaratar la factura fue la razón por la que casi 8 de cada 10 clientes optaron por cambiar de suministrador de electricidad en 2017, mientras que 3 de cada 10 clientes de gas natural cambiaron de proveedor para beneficiarse de una oferta conjunta de gas y electricidad.
El contrapunto son aquellos que decidieron permanecer 'fieles' a su compañía. Según la CNMC, más del 40% de los clientes de electricidad y gas natural siguieron con sus compañías en el último año al considerar que las ofertas de otros suministradores no les iban a suponer un importante ahorro en la factura. En el caso de las 'telecos', 1 de cada 4 clientes estaban contentos con su proveedor (ya sea con la tarifa o con la calidad del servicio y la atención al cliente), por lo que optaron por permanecer en la misma y no cambiarse.
Aunque no hay que olvidar a aquellos que no se cambiaron porque no podían. El porcentaje de hogares que ha declarado tener cláusulas de permanencia en los contratos se mantuvo estable el año pasado, de forma que en el caso de la luz y el gas rondó el 8% mientras que en las telecomunicaciones, un 28,5% de hogares ha asegurado tener una cláusula de permanencia vigente que, de incumplirla, le supondría una sanción económica.
Tal y como sucedió en 2016, los clientes que más cambiaron de compañía el pasado ejercicio fueron los del sector de las telecomunicaciones, concretamente los de la telefonía móvil, con casi un 13%, frente a un 7,7% de los clientes de electricidad y un 6,9% de los de gas natural.
