En la nueva actualización de la aplicación de mensajería ya es posible el envío de este popular formato de vídeo corto
Era uno de los "déficits" de la aplicación más famosa de mensajería instantánea, pero por fin es un hecho. Whatsapp ha lanzado su nueva actualización, por el momento disponible en versión beta, a través de la cual se podrán crear GIFs animados y poder compartirlos con los contactos.
Para que funcione el envío de GIF, tanto receptor como emisor deben tener instalada esta última actualización
No obstante, el anuncio tiene truco, ya que de momento lo que permite la actualización 2.16.242 de la app es poder grabar un vídeo y, justo antes de enviarlo, tener la opción de convertirlo en un gif. Es decir, que los gifs externos (conocidos muchos como 'memes', los más enviados a través de la red) en un principio aún no estarían disponibles de forma directa. También cabe destacar que para que funcione el envío de GIF, tanto el receptor como el emisor deben tener instalada esta última actualización.
¿CÓMO ENVIAR GIFS POR WHATSAPP?
La manera de hacerlo es la misma que si se fuese a enviar un vídeo, es decir, lo primero que se debe hacer es pulsar sobre adjuntar y presionar la opción de la cámara, eligiendo posteriormente la opción de vídeo y grabando el clip que se quiera. Justo en la pantalla donde se puede recortar la duración del vídeo para que ocupe menos, en la esquina superior derecha hay un icono de cámara de vídeo.
Si se pulsa sobre este icono, se cambiará por uno que incluye la palabra 'GIF'. Posteriormente, se elige el trozo del vídeo que queremos enviar como GIF, y que no podrá tener una duración mayor a seis segundos. Tras enviarlo se podrá observar en la ventana del chat el breve clip.
La manera para poder enviar GIFs propios almacenados en el móvil sería el almacenarlos en formato de vídeo, para luego desde la propia aplicación de Whatsapp transformarlos en este formato de vídeo, que parecía destronado tras un inicio fulgurante en internet pero que tras popularizarse el envío de 'memes' ha vuelto con fuerza.
Este tipo de archivos GIF (que esconde el acrónimo de “Graphics Interchange Format”) se popularizaron rápidamente en los inicios de internet, gracias a su alto grado de compresión, que permitía poder enviar a través de la red imágenes en movimiento en tiempos mucho más rápidos que otro tipo de formatos.