MADRID, 24 (CHANCE)
Del 24 de febrero al 1 de marzo, las tiendas de Serrano y Preciados en Madrid acogen diferentes obras de fotografía contemporánea de artistas de renombre como Candida Höfer, Peter Beard, Weng Fen, Bae Bien-U, Jordi Bernadó, Mabel Palacín o Edward Burkynsky.
Públicos y privados. Interiores y exteriores. Personales. Incluso mentales. Los espacios modelan nuestros pensamientos, despiertan nuestros recuerdos y definen nuestras conexiones con los demás.
Ya sea en la larga tradición de la pintura de paisajes, donde podemos advertir un elemento espiritual que tiene sus raíces en la filosofía oriental y el movimiento Romántico, o en las representaciones arquitectónicas -un género que cultivaron con maestría los creadores del Renacimiento e iconos del siglo XX como Giorgio de Chirico o Edward Hopper-, el arte ha explorado las relaciones con los espacios que transitamos y ha planteado preguntas sobre nuestro rol como espectadores.
Aquí es la cámara fotográfica la que articula esta narrativa. Con una marcada sensibilidad poética, las habitaciones desiertas de Candida Höfer, el diario visual de un África salvaje de Peter Beard, las enigmáticas imágenes de sujetos anónimos que miran el paisaje de Weng Fen o las cautivadoras composiciones naturales de Bae Bien-U generan sus propios discursos y nos incitan a reflexionar sobre cuestiones como el impacto sobre los recursos, el patrimonio cultural o cómo percibimos y experimentamos nuestro entorno. Invitándonos así a adentrarnos virtualmente en sus fotografías o permanecer observándolas para siempre.
A Place to Remember - visiones fotográficas de espacios y paisajes reúne una selección de fotografías contemporáneas de la colección privada de Mango que se expone al público con motivo de la celebración de ARCO, la feria de arte contemporáneo en Madrid. El escaparate y el interior de las tiendas situadas en la calle Serrano, 60 y Preciados, 10 acogerán la selección de obras que convivirán durante una semana con las colecciones de la marca invitando a sus clientes a ser partícipes del vínculo de la marca con el arte.
Estas obras y otras pertenecientes a la colección privada de Mango están habitualmente en la sede de la compañía, donde conviven día a día con los empleados, que se impregnan así de la creatividad de todos estos artistas. Y es esa misma sensación la que Mango ha querido trasladar al consumidor con esta muestra. La exposición temporal estará disponible del 24 de febrero al 1 de marzo.