Los jóvenes españoles confían en que los algoritmos ayudarán en la toma de decisiones personales, según un estudio

Estas son algunas de las conclusiones de la investigación 'Jóvenes, futuro y expectativa tecnológica', un estudio de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD), Google y BBVA presentado este jueves en Madrid. Todas con un valor "cualitativo" que aporta información sobre "las emociones" que provoca el futuro de la tecnología en la población española de entre 15 y 29, en palabras del responsable de Políticas Públicas de Google España, Antonio Vargas.

Los autores de la investigación descatan el valor cualitativo de sus conclusiones porque la muestra del estudio estuvo acotada a pequeños grupos de discusión, cada uno integrado por ocho jóvenes representativos, según la FAD, de este sector de población, y naturales de ciudades como Madrid, Valencia y Sevilla.

El objetivo, ha explicado la directora técnica de la FAD, Eulalia Alemany, era profundizar en las expectativas de los jóvenes ante el desarrollo de las tecnologías y cómo determinarán sus vidas en el futuro.

Los participantes en la investigación parecen coincidir en que serán determinantes en su vida laboral, lo que provoca una sensación paradójica en la generación nativa digital: creen que necesitan formarse y aprender constantemente sobre tecnología porque asumen la rápida obsolescencia en un mundo donde avanzan a velocidad de vértigo.

"Es un tiempo de desarrollo tecnológico exponencial, y lo viven con incertidumbre y fascinación. Revisan sus expectativas constantemente y viven con naturalidad esa obsolescencia", según Alemany, que ha enumerado algunas de las expectativas expresadas por los jóvenes que han participado en esta investigación.

"No tienen miedo a la centralización de la información, a ese 'big data' universal, porque creen que les va a hacer llegar la información que más le interesa", ha explicado la directora técnica de la FAD. Sin embargo, los jóvenes son conscientes de las contrapartidas y los riesgos que implica la acaparación de datos, aunque prefieren quedarse con lo bueno.

UNA ALIADA CONTRA LA EMERGENCIA CLIMÁTICA

"Para ellos, esas contrapartidas son menores que las ventajas", ha apostillado Alemany destacando las expectativas positivas, como la esperanza de que las nuevas tecnologías ofrecerán soluciones a la emergencia climática y contribuyan a la sostenibilidad.

También creen que los algoritmos acabarán siendo útiles hasta para tomar decisiones íntimas y cotidianas para sus relaciones sociales y en "aspectos emocionales". "Una tecnología que les ayude a que todo sea más certero", ha afirmado Alemany.

Sobre la inteligencia artificial, a los jóvenes españoles "les abruma pero piensan que es invevitable", y no tienen un discurso "dramático". Al contrario, "hablan de los 'cyborgs' como algo normal", apunta la FAD.

Ante ese futuro que proyectan, los jóvenes que han participado en el estudio, "autodidactas que se capacitan por ensayo-error", asumen sus límites ante la cascada de innovaciones. "Ellos se sienten muy formados, muy tecnológicos, en el uso de móviles e internet, pero están pidiendo otra cosa, piden que la formación tecnológica se integre más dentro educación", ha precisado Alemany en la presentación.

En todo lo que contaron los jóvenes sobre el futuro que se les avecina, también resaltan algunas lagunas: apenas hicieron mención a la biotecnología o la perspectiva de género, subraya la FAD.