La web 'hablaconunsacerdote.com' permite reservar cita para conversar con 38 curas de toda España
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
Un total de 38 sacerdotes de toda España se han sumado al proyecto 'hablaconunsacerdote.com', una web que permite a todas aquellas personas que precisen de un acompañamiento espiritual, reservar una cita para hablar con un cura por teléfono, durante la pandemia por el coronavirus COVID-19.
La plataforma, nacida hace dos semanas, ya ha hecho posible 150 citas y cuenta con 38 sacerdotes en activo y otros 20 en proceso de sumarse al proyecto. Son curas de toda España, de ciudades y pueblos, diocesanos, de movimientos y de congregaciones religiosas, "una mezcla muy bonita, algo muy católico, universal", según afirman los impulsores de la iniciativa, Patricia Domínguez y Manu Arianoff.
"Desde que empezó el confinamiento vemos que hay muchas personas que mueren solas, gente que afronta el duelo en soledad, personas que no pueden acompañar a sus seres queridos, enfermos aislados en los hospitales y en sus casa. Hay muchas personas que tienen encima una carga que no pueden llevar solos, y necesitan saber que la Iglesia y sus sacerdotes están con ellos", señalan los responsables de la web.
Se trata de una web "sencilla", según precisan, porque quieren "que todo el mundo pueda tener la posibilidad de contar con el acompañamiento de un sacerdote, especialmente pensando en aquellas personas mayores que a lo mejor no controlan bien la tecnología".
A través de 'hablaconunsacerdote.com' se accede directamente a un listado de sacerdotes y se puede escoger uno de ellos para reservar cita con él. Una vez hecha la reserva, el interesado recibe en su móvil un SMS de confirmación de la cita, y cuando llegue el momento, el sacerdote le llamará para una conversación que podrá durar, como máximo, una hora.
"Reserva mucha gente que pide citas para familiares que están en hospitales o en casa para acompañarles en su enfermedad e incluso para acompañarles a morir, teniendo antes una conversación con el sacerdote", cuentan Patricia Domínguez y Manu Arianoff. También están llamando profesionales sanitarios que lo están pasando mal, gente que antes llevaba una vida espiritual activa y necesita orientación para el confinamiento, o personas que simplemente necesitan alguien para hablar y rezar juntos, según añaden.
"Hay un abanico muy amplio", aseguran, al tiempo que desvelan que también hay jóvenes llamando con inquietudes vocacionales y padres que han solicitado ayuda para vivir la Semana Santa en familia. Además, destacan el agradecimiento de los propios sacerdotes "por poder seguir realizando su labor en unos días en los que tienen que estar en casa sin poder atender a la gente".
Uno de estos sacerdotes es Víctor Hernández, capellán del hospital La Paz y uno de los Misioneros de la Misericordia nombrados por el Santo Padre para el último Jubileo de la Misericordia, que explica cómo en el caso de personas enfermas que no pueden contar con el auxilio espiritual de un sacerdote pueden "rezar con ellas, aplicarles la bendición apostólica y conceder la indulgencia plenaria que ha concedido el Santo Padre".