Jordi González consigue el silencio absoluto en plató tras enfrentarse a Kiko Jiménez
MADRID, 2 (CHANCE)
Desde que Antonio David Flores saliese el jueves de GH VIP 7 son muchas las discusiones que ha tenido en los platós con Kiko Jiménez. Parece increíble que los dos que entraron teniendo buena relación a pesar de los problemas que tenían afuera del concurso, hayan acabado tan mal. Y es que lo cierto es que si están así es más culpa del extronista que del padre de Rocío Flores, ya que se ha dedicado a hablar de su familia desde el minuto uno que puso un pie en la calle y a meterse públicamente contra su hija.
Este domingo en el Debate de GH VIP 7, Jordi González ha tenido que enfrentarse a Kiko Jiménez y darle un toque de atención por querer meterse en más guerras con Antonio David de las que le corresponden. Lo cierto es que hemos visto al presentador más cabreado que nunca. Es muy difícil conducir una plantilla de colaboradores que no obedecen a las instrucciones que se da y que además, hablan por debajo cuando les da la gana.
Esto es lo que ha pasado con Kiko Jiménez. El concursante se metía en una conversación que solamente les competía a Antonio David y a Lucía Pariente. Tras ver un vídeo en el que Mila Ximénez confesaba echar de menos a su amigo y además, estar harta de que sus compañeras hagan 'burlas' de la salida del concursante de la casa. Cómo no, el novio de Sofía Suescun quería meterse en esa discusión para dejar por los suelos al exmarido de Rocío Carrasco y entonces... el presentador se cabreaba de tal manera que le decía:
"Pero vamos a ver Kiko, si esto es algo que tiene que ver con Lucía y con Antonio David ¿por qué coño quieres entrar? ¿Quién te da vela en este entierro? Entiendo la 'estrellitis' pero la 'estrellitis enfermiza me parece fatal".
De esta manera, Jordi González le mandó callar a Kiko Jiménez y consiguió el silencio más absoluto en el plató. Y es que lo cierto es que la inquina que tiene el extronista a Antonio David es bastante palpable en todos los programas a los que va. Desde este momento parece que el exconcursante aprendió la lección de no interrumpir al presentador y no volvió a cometer ningún desliz.