El Papa resalta la labor de quienes defienden "el derecho de asilo" frente a las políticas migratorias restrictivas

"El suyo es un ejemplo de la cultura de la acogida. Estoy cerca con la oración y el afecto a los que emigran", ha manifestado Francisco.

En su mensaje el Santo Padre ha citado los datos publicados del último Informe del Centro Astalli, un centro de acogida de inmigrantes en Roma gestionado por el Servicio Jesuita a Refugiados, que dan cuenta de las "vidas suspendidas" de los migrantes, atrapados entre las garras de la pandemia, que bloquea o ralentiza la vida cotidiana, y la incertidumbre de los que tienen que inventar una vida cotidiana desde cero en un nuevo país.

El Centro Astalli acogió a 20.000 personas en 2019, incluidos refugiados y solicitantes de asilo, 11.000 sólo en Roma. El informe denuncia que "las políticas migratorias, restrictivas, cerradas --incluso discriminatorias-- que han caracterizado el último año, agravan la precariedad de la vida, la exclusión y las irregularidades, haciendo más vulnerable a toda la sociedad".

En su mensaje al sacerdote italiano, el Papa ha apreciado especialmente el coraje "con el que, escribe, enfrenta el 'desafío' de la migración, especialmente en este delicado momento para el derecho al asilo, ya que miles de personas huyen de la guerra, las persecuciones y las graves crisis humanitarias".

Francisco también se ha referido a los refugiados a los que el Centro Astalli ha acogido, según ha señalado el Papa, "con amor fraternal". "Estoy espiritualmente cerca de todos con oración y afecto y los insto a tener confianza y esperanza en un mundo de paz, justicia y fraternidad entre los pueblos", ha manifestado.